El consejero de Hacienda, Fernando de la Cierva, vuelve a reclamar la deuda histórica provocada por la escasa financiación autonómica que recibe la Región, a cuatro meses de las elecciones autonómicas. Tal y como han venido haciendo sus predecesores periódicamente, De la Cierva ha hecho cuentas del dinero que la Región ha dejado de ingresar por culpa del arbitrario sistema de reparto aplicado desde el año 2009 y asegura que un informe externo eleva esta cantidad a casi 800 millones, que suponen el 85% de la deuda autonómica, situada en torno a los 9.300 millones al acabar el tercer trimestre de 2018.
Aunque de momento no ha precisado cómo piensa materializar esta exigencia, pone como ejemplo el caso de Andalucía, que consiguió el reconocimiento oficial de su deuda histórica por parte del Estado y recibe anualmente una asignación por este concepto.
También apuntó que la mitad de esta deuda podría asumirla el Estado mediante «una mutualización», mientras que el resto «podría reestructurarse», lo que permitiría alargar los plazos de amortización y suavizar las condiciones financieras. De momento, Fernando de la Cierva pretende que el Gobierno central reparta los 1.600 millones «que tiene en un cajón» del Fondo del Competitividad de 2018 , uno de los mecanismos de equiparación entre las comunidades que contempla el sistema de reparto autonómico, y asigne a Murcia los 156 millones que le corresponden, según sus cuentas.
El consejero recordaba que el reparto aprobado en 2009 «sitúa a la Región como la peor financiada de España, junto con la Comunidad Valenciana, ya que recibe 180 euros por habitante menos que la media de las comunidades autónomas y 846 menos que la mejor financiada, que es Cantabria».
Insistió en que «se trata de un modelo injusto, complicado, poco transparente y de resultados impredecibles, que ha generado diferencias entre territorios completamente inaceptables e injustificadas». Lo considera además el causante de la elevada deuda de la Administración regional, que se sitúa en torno a los 9.300 millones al acabar el tercer trimestre del año y en su mayor parte ha sido contraída con el Estado a través de los créditos del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA).
Fernando de la Cierva se quejó igualmente de que la aportación del Estado a la Comunidad se reduce prácticamente a la transferencia de los impuestos recaudados en la Región. «Del total de fondos que recibe Murcia para financiar sus servicios públicos, el 91% procede de los impuestos que pagan los murcianos y solo el 9% restante de los fondos de nivelación, aquellos que precisamente deberían estar compensado a la Región». Sostiene que Murcia «es la peor financiada de España, junto con la Comunidad Valenciana. Sin embargo, se niega a admitir que el desfase en la financiación se inició en 1999, porque las competencias llegaron con una dotación económica insuficiente
