«La contaminación atmosférica es un asesino invisible y necesitamos intensificar nuestros esfuerzos para abordar las causas. Las emisiones del transporte por carretera suelen ser más perjudiciales que las de otras fuentes, dado que se generan a nivel del suelo y tienden a producirse en ciudades, cerca de las personas. Por eso es tan importante que Europa redoble sus esfuerzos para reducir las emisiones causadas por el transporte, la energía y la agricultura, y que invierta en hacerlas más limpias y sostenibles». Son las palabras de Hans Bruyninckx, director Ejecutivo de la Agencia Europea de Medio Ambiente, que encabezan el informe anual sobre 'Calidad del Aire en la Región de Murcia', que presentó ayer Ecologistas en Acción.

En el mismo se explica que el año pasado las estaciones de San Basilio en Murcia y la de La Aljorra (Cartagena), fueron las que más episodios diarios de superación de los niveles permitidos tuvieron respecto a las partículas PM10, 15 y 9 veces, respectivamente. Y le siguen las dos veces que lo superaron las estaciones de Alcantarilla, Valle de Escombreras y Mompeán (Cartagena).

La contaminación producida por las partículas PM10 (de hasta 10 micras) se emite por el tráfico rodado, la industria petroquímica, las actividades metalúrgicas y de producción de fosfatos, entre otras. La exposición crónica a estas partículas se ha asociado con el aumento el riesgo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias, y, de todos los contaminantes, es el que mayor efecto negativo sobre la salud tiene, apuntan.

En otras zonas bajan

«El primer hecho a señalar este año es que se han producido carencias de datos significativas en la estación de Alumbres, Caravaca y Lorca», respecto a estas partículas, indicó el ecologista Pedro Belmonte.

Belmonte consideró necesario que en ciudades como Murcia el Ayuntamiento fuera más «valiente» y controlara más el tráfico, dejando aparcados los coches particulares en beneficio del transporte público.

Otros contaminantes

El informe describe la situación de otros contaminantes atmosféricos que afectan a la población y al medio ambiente, y que también son analizados de manera continua por las ocho estaciones medidoras que conforman la red regional de medición de la calidad del aire, cuyos datos son públicos.

Indican que la contaminación asociada a las emisiones de cruceros turísticos han aumentado significativamente en Cartagena al emplear un fuel oil pesado cien veces más tóxico que el diesel automovilístico y con 3.500 veces más contenido de azufre, por lo que piden una estación medidora en la zona de muelles de atraque y medidores de partículas ultrafinas de 0,1 micras.

En cuanto a contaminación por dióxido de azufre (SO2), se han producido 46 días de superaciones en Alumbres (Cartagena) en 2018, frente a 30 días del año anterior y 29 días en el Valle de Escombreras, un día menos que el año anterior.

Respecto a la polución por benceno, tolueno y xileno, conocida por las siglas BTX, solamente dos estaciones la miden, la de Alcantarilla y la de Alumbres, lo que da una imagen «sesgada» de este tipo de contaminación. En la estación de Alcantarilla durante el año pasado se han producido episodios de tolueno denunciados por la Plataforma Aire Limpio y CC OO de Enseñanza.

Un año más, los ecologistas denuncian que en la Región «seguimos con una red regional de vigilancia atmosférica muy antigua, infradotada y con múltiples carencias». Y que la compra de 6 analizadores «solo ha servido para paliar un pequeña parte de esas carencias y necesidades». Además, critican que sólo una estación, la de Mompeán, mide las partículas más peligrosas por su tamaño, las PM2,5.