Joanne Sterling, trabajadora de una compañía de vuelo, explicaba casi con lágrimas en los ojos que para ella San Javier era el mejor sitio para trabajar.

De hecho, lleva un tatuaje en su muñeca que simula el sello del pasaporte con la fecha de su primer día de trabajo: 27/02/06.

Además, destacaba que tras más de diez años en este aeropuerto ya había hecho su vida junto a él. Joanne reside en el mismo municipio y apunta que ahora tendrá que hacer un trayecto en coche veinte minutos más largo.

El aeropuerto de San Javier se despidió ayer con el RYR4117, el último vuelo comercial de los 50 años de historia del aeropuerto de San Javier, que partió ayer con 171 pasajeros a bordo. El avión, de la compañía de bajo coste Ryanair, despegó del aeródromo marmenorense a las 20.40 horas con destino a Manchester.