Cáritas ha incrementado significativamente los fondos que destina para afrontar las situaciones de pobreza y exclusión social, a través de programas de trabajo con la infancia y de orientación laboral con los que pretende colaborar para romper la "cronicidad" de la pobreza. Así, ha ayudado a encontrar trabajo en la Región de Murcia a 602 personas durante 2018 y ha acompañado a más de 2.000 menores.

Y es que la pobreza "se mantiene generación tras generación", de forma que ocho de cada diez adultos que viven hoy una situación de exclusión ya la vivieron siendo niños, según estudios recientes de esta ONG. Para acabar con ello, Cáritas apuesta por ampliar su abanico de ayudas con nuevos recursos que permitan romper esa "cadena".

Así lo ha hecho saber a Europa Press el secretario general de Cáritas en la Región, Juan Antonio Illán, quien ha reconocido que los servicios de atención primaria (alimentación, ropa, pago del alquiler...) se mantienen y representan un cuarto del total de los fondos, pero ha aumentado de forma "significativa" la puesta en marcha de otros recursos como los dirigidos a la infancia y el empleo, que suponen el 50% del total del presupuesto.

La ayuda primaria, que supone una inversión de 2,5 millones de euros, consiste en apoyar a las familias que no tienen unos ingresos suficientes como para afrontar con garantías el día a día, fundamentalmente para el pago de la vivienda, gastos escolares, sanitarios, vestimenta o alimentación. "Es una parte que sigue siendo necesaria pero no es suficiente para la erradicación de la pobreza", según Illán.

"En los últimos años venimos destacando que, al final, bajo los escombros de la crisis quedan sepultadas muchas familias que están teniendo muchas dificultades para salir de esa situación", según Illán. Además de la ayuda económica o en especie, Cáritas dispone de un abanico amplio de respuestas de intervención social que abarca, por ejemplo, acompañamiento a los niños en su etapa educativa y a los padres en procesos formativos.

AYUDAS PARA EL EMPLEO

Por ejemplo, esta organización dispone de una red de 162 Cáritas parroquiales repartidas por toda la Región que han atendido a 1.100 personas en el ámbito del empleo en 2018. De ellas, unas 587 han cursado acciones de formación, lo que supone un incremento "significativo" respecto a 2017.

En total, 602 se han incorporado al mercado laboral, lo que constituye una de las "grandes apuestas" de Cáritas, según Illán, quien señala que la ONG ha multiplicado por tres el presupuesto que invierte a este respecto desde 2014. En concreto, los programas de formación y empleo suponen el 21% del total del presupuesto de la ONG, que este año superará los 2,5 millones de euros.

Illán ha justificado que el número de inserciones laborales no se debe solo a la mejora económica, sino también a la mayor inversión de Cáritas en este ámbito y al trabajo conjunto con empresas, "más sensibles", y la colaboración que esta ONG va tejiendo con ellas.

Cáritas atiende a las personas que tienen una especial dificultad para acceder al mercado laboral con una primera fase individual que contempla la orientación y búsqueda activa de empleo. A continuación, Cáritas dispone de 460 plazas en 20 acciones formativas en las que han participado unas 587 personas durante 2018. Se trata, según Illán, de una formación prelaboral para personas muy alejadas del mercado de trabajo. Estas acciones son el paso previo a una formación más profesionalizada.

EMPRESA DE INSERCIÓN

El tercer bloque de ayuda para el empleo de Cáritas lo forma la empresa de inserción. Unas 42 personas se han beneficiado en 2018, lo que representa un número todavía "incipiente", aunque Illán explica que esta herramienta "empieza a emerger".