La denominada lectura fácil es una herramienta para conseguir la accesibilidad cognitiva, aquella que se refiere a la información y a la comprensión de espacios, procesos y mensajes y sin la que no es posible conseguir el reto de la accesibilidad universal, indican desde Plena Inclusión. Así, la Convención Internacional de Derechos de las Personas con Discapacidad de las Naciones Unidas dedica un artículo de forma exclusiva a la accesibilidad y define que las medidas que han de adoptar los estados partes se refieren a la eliminación de barreras de acceso edificios y vías, pero también a los servicios de información, comunicaciones y de otro tipo.

El panel de normas del módulo de respecto de la cárcel de Murcia ya está puesto en lectura fácil. La idea es que así lo entiendan todos los internos, también los que tienen discapacidad intelectural. Hay instrucciones que para alguien pueden parecer obvias, como 'si has hecho deporte, te tienes que duchar'. Pero para estas personas es básico detallarlo todo. Más cosas: 'Cámbiate de ropa si hace falta', 'repasa tu zona de limpieza', 'si llegas más de cinco minutos tarde, tendrás un negativo'.

La lectura fácil es una forma de presentar la información que cuida de tanto la forma como el contenido, para asegurar que es comprensible para sus destinatarios sin resumir ni eliminar información relevante ni infantilizar al lector.