La variante de Camarillas entrará en funcionamiento a finales de marzo, según anunció ayer el delegado del Gobierno, Diego Conesa. La apertura de este tramo de la línea de Cartagena a Chinchilla, que la Región lleva esperando desde hace casi tres décadas, acortará en unos veinte minutos el viaje a Madrid. Conesa espera que la inauguración coincida con la llegada del segundo tren Alvia a Murcia.

La variante de Camarillas empezó a construirse hace algo más de diez años, pero las obras quedaron suspendidas en 2010, supuestamente, con la pretensión de asignar al AVE toda la inversión ferroviaria que iba destinada a la Región. Su apertura permitirá suprimir unos 17 kilómetros en la curva que traza el tendido ferroviario para acercarse a Calasparra y bordear el pantano de Camarillas, lo que acortará el trayecto en unos 20 minutos «con la parada en Cieza», según precisó Conesa.

Si se cumplen estas previsiones, el tren Alvia, que en este momento tarda 3 horas y 34 minutos entre Murcia y la estación madrileña de Atocha, podría llegar a Madrid en algo menos de tres horas y cuarto. Diego Conesa espera que antes de acabar el primer trimestre del año llegue a la Región el segundo Alvia y que se adelante la salida del primer tren de la mañana, que permitirá llegar a Madrid a primera hora.

El delegado, que ayer mantuvo un encuentro navideño con los periodistas, atribuye a la antigüedad de los trenes que circulan en la Región los continuos retrasos, de los que no se salva casi ningún trayecto. Reconoció que Murcia, junto con Extremadura, tiene «los trenes más antiguos» de toda España, que no podrán renovarse hasta que se electrifiquen las líneas ferroviarias y puedan utilizarse nuevos vehículos. A su juicio, estos trenes resultan comparables a «un coche con 400.000 kilómetros», que se rompe por viejo constantemente.

El delegado considera que ha pacificado la situación social tras los conflictos provocados por las reivindicaciones en inversiones ferroviarias y se muestra convencido de que el Ministerio de Fomento y Adif cumplirán los compromisos adquiridos en el soterramiento de Murcia y en el Corredor Mediterráneo.