Hablar del cannabis es más que referirse a esas plantas de marihuana que la Policía encuentra, cada vez más a menudo, escondidas en domicilios de la Región. El cannabis está compuesto por más de cien sustancias químicas, de las cuales destacan el tetrahidrocannabinol (THC) y el cannabidiol (CBD). El THC es una sustancia estupefaciente que altera el sistema nervioso central, pero resulta que el segundo no es psicoactivo y se obtiene a través de una extracción de la flor de marihuana. No es raro que lo empleen pacientes que tienen esclerosis múltiple para combatir la espasticidad (músculos contraídos). De hecho, en el Virgen de la Arrixaca se usa de forma completamente legal. No se trata de personas fumando en su casa por su cuenta para aliviar el dolor. Se trata de tratamientos médicos.

Jose Eustasio Meca Lallana, neurólogo y director de la Unidad de Esclerosis Múltiple del Virgen de la Arrixaca, explica que en este hospital actualmente hay entre 60 y 70 pacientes de esclerosis múltiple tomando, como parte de su tratamiento, un spray de cannabis medicinal, el cual «hace mejorar mucho uno de los síntomas» de esta enfermedad. El cannabis se convierte, de esta manera, en una opción terapéutica que permite a estos enfermos mejorar su funcionalidad y calidad de vida.

El doctor Meca subraya que «se personaliza el tratamiento en función del paciente», y precisa que «se administra en spray, se pulveriza en la mucosa bucal».

La espasticidad es un síntoma caracterizado por la rigidez muscular progresiva, además de por calambres y espasmos musculares que producen al paciente, además de dolor, una limitación funcional significativa, recuerda el médico.

Los enfermos, además, han notado otra mejora, y es que «con la esclerosis, otro órgano que sufre rigidez es la vegija: se contrae mucho, se queda más chiquitita y los pacientes orinan una pequeña cantidad», detalla Meca Lallana, que deja claro que «no utilizamos el fármaco para esto, pero los pacientes a los que hemos puesto esta medicación nos dicen que dejan de tener esa sensación tan desagradable» a la hora de miccionar, «les ha mejorado mucho». «Queremos abrir una investigación en esta línea», adelanta el facultativo.

A la hora de hablar de las propiedades del cannabis, el neurólogo manifiesta que «como médico, no puedo recomendarlo», ya que, recuerda, se trata de «una droga ilegal». «Hay pacientes que dicen 'qué bien, me voy a fumar un porro'. Pero nunca podemos indicar eso. Es como el uso médico de la morfina: su prima hermana es la heroína», apunta Meca Lallana, al tiempo que resalta que «el cannabis es una sustancia que, bien controlada por un médico, da muy buenos resultados».

Apostilla que el tratamiento tiene una pega, que es «el sabor», dado que varios pacientes «se quejan de que es desagradable» pulverizarse en la boca. Para paliar esto, «remedios caseros y caramelos de menta», afirma el doctor.

Mientras, «en Reino Unido se está investigando con cannabis en cápsulas», comenta. Los avances continúan.