Los transportistas murcianos que han presentado sus demandas a través del despacho al que ha recurrido la patronal FROET reclamarán en los tribunales unos 40 millones de euros al cártel de camiones que durante catorce años cobró un sobreprecio por los vehículos que vendían, según las estimaciones del despacho Caamaño, Concheiro y Seoane Abogados. Este bufete está tramitando la devolución del dinero que pagaron de más las empresas asociadas por la compra de unos 2.600 vehículos. Esta cifra daría derecho a los compradores a recuperar unos 28 millones de euros, a los que se sumarían otros 12 millones en concepto de intereses, según sus cálculos.