La división del Tribunal Supremo y la escasa diferencia de votos -15 magistrados contra 13- con la que se ha resuelto que los compradores de viviendas hipotecadas sigan pagando el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados hace prever que el dilema acabará en el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), con sede en Luxemburgo, como había ocurrido anteriormente con las sentencias relativas a la cláusulas suelo. Las asociaciones de consumidores se han apresurado a criticar el fallo y Facua ha acusado al sector financiero de difundir mensajes «engañosos y alarmistas para no tener que asumir el impuesto»; asimismo, un portavoz mostraba su confianza en que, al igual que ocurrió con las cláusulas suelo, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea hará justicia.

También la organización de Técnicos de Hacienda Gestha, que ayer mostraba su sorpresa por el fallo judicial de la Sala de lo Contencioso, da por hecho que el Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid, que había presentado los tres recursos causantes de las polémicas sentencias, acudirá a la Justicia Europea

Por su parte, la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros de España (Adicae) lamentó que «una monumental campaña de la banca para no pagar» haya provocado que el Tribunal Supremo fallara a favor de las entidades bancarias sobre el impuesto a las hipotecas al resolver que es el cliente quien tiene que pagarlo. Para Adicae, la campaña «ha envuelto a toda la sociedad» y ha tenido en vilo a toda la opinión pública para lograr «lo que suele intentar siempre -la banca-, no pagar lo que la Ley y la Justicia determinan».