El decano del colegio de Arquitectos de Murcia, Rafael Pardo, ha advertido que el urbanismo vive una etapa de «parálisis» en la Región tras la crisis que ha atravesado el sector de la construcción, y considera «urgente» renovar el modelo estableciendo unas directrices y criterios comunes para todos los municipios. «En la Región seguimos con el mismo urbanismo que teníamos hace 12 años, cuando estábamos en plena burbuja del sector inmobiliario», según Pardo, quien apuesta por «aprender» de la crisis para "hacer las cosas de forma distinta, tal y como ha declarado con motivo del Día Mundial del Urbanismo, que la ONU conmemora el 8 de noviembre.

Pardo apuesta por unas directrices regionales que establezcan unos criterios comunes para todos los municipios, tal y como establece la Ley del Suelo en la Región. De la misma forma, apuesta por «actualizar la gran mayoría del planeamiento general de los municipios de Murcia», ya que se encuentra «obsoleto» y se remonta en muchos casos, incluso a la década de los años 80 del siglo XX. «Desde entonces, han cambiado mucho las cosas», asevera.

Ha remarcado que el urbanismo regula, por ejemplo, cómo se producen los asentamientos humanos, las actividades que se desarrollan en el territorio, las comunicaciones o el transporte, por lo que estima necesario que los ayuntamientos «empiecen procesos para renovar los planes urbanísticos». Para ello, insta a abrir procesos importantes de participación ciudadana, teniendo en cuenta los nuevos retos del futuro que pasan, por ejemplo, por el cambio climático o los procesos migratorios. Asimismo, cree que el urbanismo no debe contemplarse en muchos municipios murcianos «como un proceso expansivo sino como un proceso de reconstrucción».

Y es que muchos barrios han quedado «a medio construir» y han entrado en un proceso de «degradación» en el que es importante «mirar hacia adentro y coser cicatrices y costuras». Ha puesto como ejemplo el caso de la ciudad de Murcia, donde «tenemos un reto por delante, una vez que se resuelva el soterramiento del ferrocarril». En concreto, advierte de que este reto pasa por «coser el norte y el sur del municipio».

Ley de Aceleración Empresarial

Al ser preguntado por el efecto de la recién aprobada Ley de Aceleración Empresarial en el desbloqueo de los planes de ordenación urbana, Pardo ha dado la «bienvenida» a cualquier medida que favorezca la agilización administrativa. «A mí, lo único que me preocuparía es que se dé un impulso a la tramitación de los grandes promotores y no se preste atención al particular que quiere pedir una licencia para rehabilitar su casa o hacerse una nueva vivienda», ha puntualizado.

A este respecto, ha señalado que los planes parciales en la Región, para generar suelos edificables, «tienen unos retrasos grandísimos». De hecho, explica que «se ha convertido e algo normal barajar 8, 9 o 10 años si alguien quiere desarrollar un plan parcial para generar nuevo suelo», cuando «se podría desarrollar en muchísimo menos tiempo».

El problema, añade, es que «se ha creado una gran complejidad en los trámites y las administraciones no son lo suficientemente ágiles». A Pardo le consta que todo el sector está «muy preocupado» porque «se está empezando a notar la falta de suelo en ciertos sitios», lo que repercutirá en un «encarecimiento de los suelos disponibles».

Pardo cree que debe haber suficiente oferta de suelo para que no se encarezca el construir, comprar y alquilar una casa. «Empieza a faltar suelo urbano directo disponible», según el decano de los arquitectos murcianos, quien considera necesario poner en valor las bolsas de suelo que han quedado «a medio desarrollar».

Preguntado por la posibilidad de repetir los errores que condujeron al estallido de la burbuja inmobiliaria, Pardo ha recordado que «se estaban construyendo muchas más viviendas de las necesarias» a unos precios muy elevados dentro de un «proceso especulativo del suelo». Ahora, se trata de «que el sector esté más equilibrado».