La Consejería de Salud deberá abonar 33.000 euros como indemnización a la familia de un paciente que falleció tres días después de sufrir una caída cuando se encontraba en los aseos del hospital en el que se hallaba ingresado.

Así se indica en un dictamen emitido por el Consejo Jurídico de la Región de Murcia (CJRM), que señala que debido a la edad del enfermo (77 años) y a que recibía tratamiento anticoagulante, se le debió haber realizado una Tomografía Axial Computerizada (TAC) en los primeros momentos para descartar un daño cerebral.

El paciente falleció el 1 de febrero de 2016 en el hospital Virgen de la Arrixaca, al que había sido trasladado desde Los Arcos del Mar Menor tras detectarle una hemorragia cerebral provocada por la caída. No se le practicó la TAC hasta el día siguiente del incidente, a pesar de que «era aconsejable la realización urgente de dicha prueba y de un control anticoagulación para objetivar el riesgo hemorrágico».