Los estudiantes de Periodismo que ayer asistieron al pleno de la Asamblea Regional presenciaron uno de los debates más broncos desde la llegada al Gobierno del presidente regional, Fernando López Miras, a quien el portavoz de Podemos, Óscar Urralburu, consideró «la mascota de la patronal». Aunque las preguntas presentadas por los grupos de la oposición al jefe del Ejecutivo en la sesión de control al Gobierno estaban referidas a la situación económica y laboral de la Región, las réplicas y contrarréplicas del propio López Miras y del portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Víctor Martínez, fueron subiendo de tono hasta convertirse en un cúmulo de reproches por la moción de censura que llevó a Pedro Sánchez a La Moncloa y por las acusaciones mutuas de corrupción.

Víctor Martínez protagonizó uno de los momentos de mayor tensión, cuando se dirigió al portavoz socialista, Joaquín López Pagán, para espetarle que en el PP «nadie ha gastado dinero en casas de citas con el dinero de los lorquinos», en alusión a los gastos cargados por exdirectivos y exediles de este municipio a la empresa municipal de limpieza Limusa durante un viaje a Sevilla, cuando el Ayuntamiento estaba gobernado por el PSOE.

El pleno empezó a caldearse cuando Urralburu le dijo a López Miras que «más allá de ser prácticamente la mascota de la patronal», llame a su presidente, José María Albarracín, para pedirle que se siente a negociar una subida salarial para los sindicatos.

López Miras, que se había preparado muy bien su contestación al portavoz de Podemos, le recordó que la Constitución consagra la libertad sindical, citando el artículo en cuestión expresamente, y le espetó a Urralburu que el texto español es diferente de «las constituciones bolivarianas». También acusó a Podemos y al PSOE de intentar «un nuevo atentado contra la Región con el cierre del trasvase Tajo-Segura», aunque dio por hecho que estos dos partidos no iban a conseguir acabar con el Acueducto.

Urralburu siguió insistiendo: «Haga algo para que en el año 2020 no haya personas en la Región que ganen menos de 1.000 euros», le pidió al presidente, quien le respondió en apenas cinco segundos, algo que molestó al diputado de Podemos y lo destacó en sus redes sociales.

El ambiente estaba ya más que caldeado cuando llegó el turno de preguntas del PSOE y su portavoz acusó al PP de actuar movido por «el deseo de venganza» desde que se produjo la moción de censura que desbancó a Mariano Rajoy del Gobierno. «No lo soportan. Tienen un partido corrupto de arriba a abajo», apuntó Joaquín López.

El portavoz popular reconoció que el 2 de junio, fecha del cambio de gobierno, fue «un día fatídico», pero le contestó a Joaquín López que el Ejecutivo socialista llegó a gastarse «hasta el fondo de los niños de la Guardia Civil». También reprochó a Pedro Sánchez que negocie con los separtistas catalanes encarcelados y huidos. «Roma no paga a traidores, pero Pedro Sánchez, sí», aseguró Víctor Martínez.