El dispositivo de retirada de las redes antimedusas que han permanecido durante los meses de verano en el Mar Menor ha permitido localizar, hasta ahora, un total de 60 caballitos de mar (hippocampus guttulatus). Todos estos ejemplares, que habían encontrado un refugio en las redes, han logrado ser liberados con vida y reintroducidos con éxito en su hábitat natural.

El operativo de la Consejería de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente está compuesto, en concreto, por una docena de pescadores de la Cofradía de San Pedro del Pinatar, cuatro buzos y un biólogo. A ello hay que sumar una quincena de buzos voluntarios de la Asociación Hippocampus, que todos los años participan en las labores de retirada de las redes para rastrearlas, y localizar y liberar a los caballitos de mar.

El director general de Medio Ambiente y Mar Menor, Antonio Luengo, visitó hoy San Pedro del Pinatar para comprobar la evolución de estas labores de desmontaje, que se iniciaron a principios de octubre y cuya finalización está prevista para este 15 de octubre.

"Este año, y al igual que ya ocurriera el año pasado, la profesionalidad y la implicación de todos y cada uno de los integrantes de este dispositivo ha permitido la supervivencia del 100 por 100 de los caballitos de mar que habían buscado refugio en las redes antimedusas", señaló Luengo.

El incremento del número de ejemplares localizados durante la retirada de las redes muestra la recuperación de la flora y la fauna del Mar Menor. Además, en los últimos días se han contabilizado más de medio centenar de ejemplares de esta especie en la zona señalizada y protegida este verano y que será declarada Reserva Ecológica Especial.

Los 43 kilómetros de redes anti medusas, distribuidos en 1.100 paños, han permanecido durante tres meses y medio para tratar de garantizar un baño seguro y sin molestias en 60 áreas del Mar Menor.

Hasta el pasado mes de agosto, los integrantes del dispositivo de limpieza y mantenimiento habían tenido que resolver una quincena de incidencias, relacionadas sobre todo con roturas de las redes y cambios de ubicación o con pequeñas embarcaciones o motos de agua amarradas en los fondeos de las mismas.