Un consumo moderado de huevos, hasta uno al día, es compatible con una dieta saludable y no conlleva efectos negativos ni tiene relación directa con la supervivencia de la población, según un estudio realizado mediante un seguimiento durante 18 años de 40.000 personas de entre 29 y 69 años. El estudio, liderado por el Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (Idibell) y en el que han participado investigadores de la Región, ha sido dado a conocer con motivo de la celebración ayer del Día Mundial del Huevo y publicado en la revista European Journal of Nutrition.

El trabajo ha recibido el premio de investigación del Instituto de Estudios del Huevo y fue llevado a cabo de forma independiente por el equipo de investigación durante 2107 y 2018. «Este estudio permite recomendar a la población general el consumo moderado de huevo, hasta un huevo al día, dentro de una dieta variada y saludable, como podría ser la dieta mediterránea», resume Raúl Zamora, director del estudio.

La investigación se ha llevado a cabo en la cohorte EPIC-España (European Prospective Investigation into Cancer and Nutrition Study) de más de 40.000 hombres y mujeres provenientes de las provincias de Asturias, Granada, Guipúzcoa, Murcia y Navarra, reclutadas entre 1992 y 1996 y seguidas hasta 2011-2013 dependiendo de cada centro.

Todos los participantes eran personas sanas, mayoritariamente donantes de sangre. En cuanto al consumo de huevos de cada participante se estimó gracias a un cuestionario de la dieta realizado durante una entrevista personal al inicio del estudio. Durante los 18 años de seguimiento, el trabajo ha certificado 3.561 defunciones de las cuales 1.694 fueron a causa del cáncer, 761 de enfermedades cardiovasculares y 870 debido a otros factores.

El consumo medio de huevos de los participantes del estudio fue de alrededor de medio huevo diario (22 gramos/día en mujeres y 31 gramos/día en hombres), considerando que un huevo estándar pesa aproximadamente 50 gramos (su porción comestible).

El porcentaje de participantes que no consumían huevo fue sólo del 5% y de los que comían más de un huevo al día (50 gramos/día) fue menor al 10%, por lo que el resultado no puede extrapolarse a consumos superiores. En este estudio no se observó ninguna diferencia significativa en la supervivencia total -ni por cáncer ni por enfermedad cardiovascular- entre los consumidores más elevados de huevo (30 y 43 gramos/día en mujeres y hombres respectivamente).