La consejera de Turismo y Cultura, Miriam Guardiola, aseguró ayer en un encuentro con representantes del sector turístico que trabajan en un decreto de vivienda de uso turístico que verá la luz próximamente y mientras tanto han reforzado la inspección con el objetivo puesto en los alojamientos no reglados.

La Consejería implantó un plan de medidas para minimizar la oferta clandestina de viviendas vacacionales en la Región. La primera actuación será la contratación de un equipo de apoyo que refuerce la labor del personal de inspección del Instituto de Turismo. Así se agilizará la detección de la oferta alegal de viviendas de uso turístico en las plataformas digitales y se conseguirá duplicar el volumen de inspecciones, dando cobertura a aquellas labores que no sean exclusivas del personal funcionario, según indicaron fuentes regionales en una nota.

La consejera anunció que el Instituto de Turismo de la Región de Murcia (ITREM) dispondrá en los próximos meses de una nueva aplicación tecnológica capaz de identificar y monitorizar los alquileres de uso turístico publicitados en plataformas de economía colaborativa como AirBnb, Homeway y Wimdu, que facilitará información clave como localización, tarifas, estancia mínima, así como el nombre completo y dirección del responsable del alquiler y el calendario de reservas.

Asimismo, se trabaja con la gerencia regional del Catastro a fin de obtener información que permitirá identificar a los propietarios de las casas publicitadas en los canales de comercialización que no estén dados de alta, lo que permitirá culminar el proceso de inspección e imponer sanciones.

Desde la puesta en marcha del Plan Estratégico de Turismo se han clasificado 2.075 viviendas de las 16.500 viviendas que se destinan al alquiler turístico en la Región. Uno de los retos del Instituto de Turismo para este año es regularizar 600 viviendas de uso turístico (más de 2.700 plazas).

Hasta la fecha, los inspectores han llevado a cabo 166 visitas (superando el objetivo de 125), consiguiendo regularizar 417 viviendas (70% del objetivo).

Para reforzar toda esta estrategia, la Consejería está trabajando en distintos campos de forma simultánea. El primero es el normativo, con el nuevo decreto específico para viviendas de uso turístico, que se encuentra en sus últimos trámites y que estará aprobado en 2019, que garantizará la calidad en la prestación del servicio de esta modalidad de alojamiento, simplificando el proceso de registro y abriendo la puerta a la promoción y comercialización institucional.

Asimismo, se continúa avanzando en las negociaciones con las plataformas tecnológicas como Booking para evitar que publiciten alojamientos no reglados.

Otras actividades destacadas que ha liderado la Consejería son la puesta en marcha de la campaña de inspección de verano, que se saldó con la realización de 58 visitas y 283 nuevas viviendas vacacionales registradas.