Más de 600.000 pacientes murcianos, en torno al 42% de la población de la Región, consumieron el año pasado algún tipo de psicofármacos. En concreto, el 19% de los usuarios (del Servicio Murciano de Salud) requirieron ansiolíticos, un 20% antidepresivos y casi el 5% necesitaron antipsicóticos. Así lo decía ayer el director general de Asistencia Sanitaria, Roque Martínez, quien apunta a una «sobremedicación» de los pacientes, para añadir que «pretendemos que se aborde el tratamiento de estos pacientes sin necesidad de fármacos».

Trastornos como la ansiedad, el estrés postraumático, la bipolaridad, depresión, bulimia o la esquizofrenia son algunos ejemplos de estas patologías, en cuya detección los médicos de familia tienen un papel muy importante. Desde el SMS están desarrollando una serie de cursos dirigidos a los profesionales sanitarios con el fin de que se formen en tratamientos grupales o psicológicos que pueden ser beneficiosos para los enfermos, sin necesidad de recurrir al fármaco. «Estamos impulsando el modelo de atención comunitaria, intentando 'despsiquiatrizar ' a estos pacientes para que el tratamiento se aborde desde un entorno lo más normalizado posible, desde sus equipos de atención primaria y sus centros de salud», subraya.

Por ello, apela al trabajo conjunto entre el SMS con ayuntamientos, empresas, oficinas de farmacia y los centros educativos. «Es fundamental que la sociedad identifique este problema y que todos los agentes puedan abordarlo». Así, la Comunidad Autónoma ha puesto en marcha un dispositivo de centros de salud mental por toda la Región que, desde 2017, se han incorporado a cada área de salud. «Antes eran dispositivos independientes, pero ahora se consideran una especialidad más dentro de cada área», apunta. Así, desde atención primaria se pueden identificar los problemas que presentan estas personas y, así, se abordan desde el mismo centro de salud. Si se necesita apoyo del centro de salud mental, se derivan al mismo.

«La mayoría de este gran volumen de pacientes corresponde a trastornos leves que en pocos meses pueden superar la crisis», apunta el director general.

También existen asociaciones especializadas, que en la Región alcanzan la cifra de 13. Todas ellas cuentan con centro de día, y se agrupan en la Federación de Salud Mental de la Región de Murcia. Su presidenta, Delia Topham, reclama que los usuarios de salud mental «se sientan reconocidos como una persona más y se defiendan sus derechos».

«Hay muchísimo aislamiento y prejuicios», lamenta, «de la sociedad en general e incluso de la misma familia».

La Asociación de Familiares y Personas con Enfermedad Mental de Molina de Segura (Afesmo), es una de esas asociaciones integradas en la federación regional. En su sede cuentan con centro de día con capacidad para 169 personas y en el que se ofrece servicio de comedor, asesoramiento e información, pero también distintas actividades terapéuticas, deportivas u ocupacionales. Dentro de estas actividades destaca la batukada que se ha creado o la banda 'Viajeros del soul'. «Hacer algo con un grupo de amigos y que salga bien siempre es terapéutico y gratificante», apunta la directora de esta asociación, Alberta Martínez. Otro de sus servicios destacados es el de Promoción de la Autonomía Personal, que cuenta con club social, viviendas tuteladas y pisos compartidos. «No vivir bajo la supervisión de los padres es parte de la recuperación y les permite desarrollar muchas habilidades», asegura. Así, vivir libres y tomar decisiones sobre su propia vida es, finalmente, parte de la propia recuperación.