La presidenta de la Sociedad Murciana de Homeopatía, la doctora Ana María Gálvez Mirón, considera que «es inadmisible que, desde el desconocimiento, se pretenda manipular a la opinión pública presentando como peligrosas unas terapias que, precisamente, se caracterizan por tener mínimos efectos adversos secundarios y máximos resultados». Es la respuesta de esta médico murciana -que preside una asociación constituida por más de 50 miembros- ante el manifiesto impulsado por la Asociación para Proteger a los Enfermos de Terapias Pseudocientíficas (APETP) y respaldado por un millar de médicos, científicos e investigadores españoles.

A juicio de Gálvez, «no hay una pérdida de oportunidad terapéutica, como quieren hacer creer sus detractores, ya que la mayoría de los pacientes que buscan las terapias complementarias acuden porque no han encontrado solución en la medicina convencional». Y añade: «Las terapias complementarias curan a miles de pacientes. Por eso deben ser practicadas por profesionales sanitarios, adecuadamente formados. Las universidades y los colegios profesionales tienen el deber de respaldar y fomentar todas aquellas terapias que puedan curar o aliviar el sufrimiento de los pacientes».