La Audiencia Provincial de Murcia, en una resolución contra la que no cabe recurso alguno, ha desestimado el recurso presentado por unos padres contra el auto de un Juzgado de Instrucción que acordó abrir un procedimiento contra ellos por la presunta comisión de un delito de abandono de familia por no preocuparse de la escolarización de su hijo.

En su recurso, al que se adhirió la madre, el padre solicitó el sobreseimiento de la causa y, como diligencias de instrucción subsidiaria, que fueran llamados a declarar como testigos dos hermanos del menor.

El tribunal de la Audiencia, al desestimar el recurso, dice que la causa debe seguir adelante, dados los indicios que figuran en las diligencias, que apuntan a que se puede haber cometido el citado delito, cuya persecución fue instada por el ministerio fiscal.

Y añade que el auto recurrido recoge un presunto comportamiento sostenido a lo largo de tres años, "expresivo de una grave y reiterada desatención por parte de los dos progenitores en cuanto a la exigencia que a ellos compete".

Y añade que esa exigencia nace del hecho de que el menor, por su edad, está sometido a una escolarización obligatoria con el fin de garantizar la educación integral del mismo.

Y señala también que los indicios permiten deducir que los denunciados pudieron incumplir su obligación de tener escolarizado al menor y asegurarse de que el mismo acudía al centro educativo y preocuparse del resultado de su escolarización.

El auto comenta que la desidia de sus deberes como progenitores fue absoluta, hasta el punto de que no atendieron diligentemente los requerimientos del colegio para saber los motivos por los que el niño faltaba tantos días a clase.

Finalmente, señala que cuando los denunciados respondían a esos requerimientos "lo hacían con menciones a unas supuestas dolencias o enfermedades en ningún caso mínimamente justificadas".