Lleva años sobre el papel, y ha pasado de administración en administración estatal, pero nunca se ha puesto en marcha. Ahora, ha llegado el momento de crear un banco público del agua «para agilizar las cesiones de derechos entre los usuarios». Eso es lo que reclamó ayer el consejero de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Miguel Ángel del Amor, al presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Mario Urrea, en la primera reunión mantenida desde que está al frente del organismo de cuenca.

Del Amor recordó que esta medida aparece reflejada en el Pacto Regional del Agua, un documento al que quiere «seguir dando traslado» como el germen del Pacto Nacional del Agua.

Este banco «daría una mayor transparencia y agilidad a las cesiones de derechos a los usuarios de la cuenca», y el consejero apuntó que era el «principal eje del Pacto Nacional» junto a la ejecución de otras infraestructuras de interconexión de cuencas en el resto del territorio español.

Por su parte, Mario Urrea señaló que el Banco Público del Agua «no es una idea nueva» sino que se remonta al año 2004, cuando él mismo intervino «activamente» en su diseño como jefe de oficina. No obstante, puntualizó que es un asunto de «nivel nacional» y le corresponde al Gobierno de España acometerlo.

A este respecto, manifestó que la CHS tiene un centro de intercambio de derechos, «pero comprenderán que es muy complicado que los propios usuarios de una cuenca deficitaria como la del Segura cedan derechos». No obstante, reconoció que hay «alguno dispuesto a hacerlo» y que la CHS «debe de activarlos».

Apoyo al acueducto sin fisuras

Otro de los temas que debatieron ambos dirigentes fue la defensa sin fisuras del Trasvase Tajo-Segura. Del Amor pidió al presidente del organismo de cuenca que traslade al Ministerio de Transición Ecológica que «esta infraestructura no puede ser excepcional», y que «tampoco puede haber retrasos en el último desembalse del año hidrológico, por el riesgo de perder el caudal que no haya llegado a la cuenca el 30 de septiembre». A juicio del consejero, el trasvase es una infraestructura «ordinaria» y «vital» para los agricultores y ganaderos de la Región. Y reivindicó la importancia de tratar a la cuenca del Segura como «deficitaria».

El presidente de la CHS, por su parte, reconoció que el Trasvase es un tema «controvertido», algo que no es «de ahora» sino que «lleva muchos años en los medios». A este respecto, se remitió a las palabras del delegado del Gobierno, Diego Conesa, cuando afirmó que hoy por hoy, el trasvase es «irrenunciable». Urrea se atrevió a calificar de «extraordinarias» las cantidades que, como recurso renovable, tiene la cuenca del Segura. E indicó que la cuenca tiene solo con 400 m3/habitante/año, cuando organismos internacionales «dicen que deben ser, como mínimo, mil».

Último trasvase del año

Por último, el consejero Del Amor reclamó que la Junta de Explotación del Acueducto se reúna lo antes posible para dar luz verde al último trasvase del año hidrológico, que acaba el 30 de septiembre, para no perder el agua que corresponda. Tanto el Gobierno regional como los regantes reclaman el máximo de 20 hm3 correspondientes al nivel 3 del Memorándum del Tajo.