A los pacientes con VIH que participen en el grupo de intervención ampliada se le realizarán pruebas de detección y diagnóstico de nódulos y tumores con mayor frecuencia de la que se haría de forma convencional en la Región de Murcia.

De hecho, a aquellas personas mayores de 40 años, fumadores activos o que lo han dejado hace menos de tres años se les hará un escáner de la caja torácica todos los años para buscar posibles nódulos pulmonales. Esta es una de las pruebas más importantes debido a que el cáncer de pulmón es el más común entre los seropositivos.

En el caso de pacientes con fibrosis y/o con Hepatitis B, tendrán que hacerse una ecografía semestral. Así los médicos de la investigación intentarán diagnosticar el cáncer de hígado en la primera fase.

También cada seis meses, para detectar tumores en el ano, y, especialmente, en hombres homosexuales con VIH; se realizarán estudios digitales y citologías.

Del mismo modo, dos veces al año, a mujeres sexualmente activas entre 21 y 64 años se le hará una citología cervical.

Además, las mujeres, una vez que cumplan los 30 años, se realizarán el test del virus del papiloma humano.

A su vez, para diagnosticar mejor y antes el cáncer de mama, todas las mujeres con VIH se harán una mamografía cada año.

Por último, para el cáncer de recto en hombres, se analizará la sangre oculta en heces a partir de los 40 años. Cabe destacar que, a estos hombres, a partir de los 50 años, también se les hará estudios rectales digitales anuales.

En cambio, los pacientes que formen parte del grupo de intervención convencional, con medidas habituales en todos los hospitales en los que son tratados y recomendadas por la Sociedad Europea de SIDA, se realizarán las pruebas para el cáncer de colon y recto cada 1-3 años. También tendrán los mismos plazos de tiempo para mamografías, citologías cervicales y exámenes digitales del recto.