Siguiendo el principio de precaución y por ser necesaria una decisión motivada. Así argumentan desde el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) la petición de la ministra, Teresa Ribera, de más informes antes de autorizar un nuevo trasvase al Segura desde la cabecera del Tajo para el mes de agosto.

Por ello, la Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura se va a volver a reunir hoy, una semana después de que elevara a la ministra un informe en el que indicaba que los pantanos de Entrepeñas y Buendía se encuentran en nivel 3 y que es posible enviar un máximo de 20 hm3.

Esta comisión es eminentemente técnica y basan sus conclusiones en informes que facilitan las confederaciones hidrográficas implicadas (entre ellas la del Tajo y la del Segura) y el CEDEX (Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas), entre otros.

La ministra, a quien corresponde la decisión final sobre la cantidad que se va a trasvasar, ha encomendado a la Comisión que realice un análisis de la evolución de los pantanos en función de los escenarios posibles dependiendo del agua que se envíe al Levante.

A partir de ahí, Ribera tomará una decisión «lo antes posible», precisaron fuentes ministeriales, que puntualizaron que según la Ley la ministra tiene todo el mes para hacerlo.

En referencia a si la titular del Miteco había pedido a la Comisión que tuviera en cuenta los recientes informes de la Confederación del Tajo sobre los nuevos aforos del Entrepeñas y Buendía, las fuentes ministeriales indicaron que «no nos consta».

El consejero de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Miguel Ángel del Amor, calificó de «sorprendente» la decisión de Ribera, indicando que «suena a que busca una excusa para no autorizar ningún trasvase». El consejero ha solicitado el acta de la anterior reunión de la Comisión, porque considera que ya entonces se debieron exponer estos escenarios.

«En estos encuentros se ve cuánto agua hay, cuánto va a necesitar el Tajo y, en tercer lugar, las necesidades del Segura», dijo Del Amor, añadiendo que «si nos ponemos en el peor de los casos y no llueve nada sigue siendo posible trasvasar, al menos, 20 hm3 sin afectar al Tajo».

Acciones legales

El consejero mantuvo ayer una reunión informal con organizaciones agrarias, encuentro en el que quedó claro que si no hay trasvase para regadío se iniciarán acciones legales «muy bien argumentadas» en contra de esta decisión, tanto desde el Gobierno regional como del sector. «Se pedirán daños y perjuicios porque puede producirse una merma en la producción», subrayó.