El número de interrupciones voluntarias del embarazo entre las jóvenes menores de 19 años de la Región se ha incrementado levemente en un año. Según las cifras recogidas por el Servicio Murciano de Salud (SMS), el año pasado tuvieron lugar 19 abortos en menores de 15 años y 389 entre 15 y 19 años, mientras que en 2016 la cifra fue de 17 y 360, respectivamente.
El consejero de Salud, Manuel Villegas, hizo públicos estos datos durante la presentación de los resultados del proyecto pionero 'Edusex', sobre salud afectiva y sexual para adolescentes, desarrollado este año de manera piloto en tres institutos de Secundaria de Cieza.
Por lo que se refiere a los embarazos no deseados, por contra, las cifras muestran una «notable reducción», ya que en 2017 se constataron 564 casos en jóvenes de entre 15 y 19 años, mientras que en 2016 se contabilizaron 691,127 menos.
Villegas explicó que con esta iniciativa se pretende «mejorar los conocimientos y la educación sexual en la población mediante estrategias de prevención como la educación sanitaria, el desarrollo de habilidades y mejorar el acceso a métodos anticonceptivos de una manera fácil». Este tipo de intervenciones «alertan e instruyen a nuestros jóvenes sobre los riesgos del sexo sin prevención», añadió.
El consejero estuvo acompañado por el director general de Salud Pública y Adicciones, José Carlos Vicente, y por la matrona de Atención Primaria Francisca Postigo, 'alma' del proyecto, según Villegas, que comentó que los resultados «son buenos y esperanzadores». Sobre todo en la nueva percepción de la sexualidad, «de manera más saludable, con un mejor uso de los métodos anticonceptivos que reduzcan las enfermedades de transmisión sexual».
Además, el consejero comentó que la iniciación al sexo, con coito, se produce a los 14 años, edad que ha ido descendiendo progresivamente desde los habituales 16-17 años. «Por eso, es un reto para la salud pública prevenir los embarazos no deseados y las enfermedades de transmisión sexual». La gonorrea y la sífilis son las más habituales entre los jóvenes, enfermedades que están aumentando entre estos colectivos.
El proyecto se ha puesto en marcha en los cursos de 3º y 4º de la ESO, en los IES Los Albares y Jaime Balmes y en el colegio concertado Juan Ramón Jiménez.
Francisca Postigo alertó de que la pornografía que se ofrece en Internet, a la que acceden con mucha facilidad los adolescentes, «está ocupando el espacio de los padres y profesionales en la educación sexual» de esta población.
«Les lleva a pensar que lo que allí ven es normal, por lo que interiorizan y reproducen esos comportamientos», advirtió la matrona.
