Un nuevo informe científico vuelve a poner el foco en el Mar Menor. Y lo hace a corto y medio plazo, aunque la mayor gravedad la sitúa en los próximos 100 años al prever que el nivel del agua en la laguna podría subir un metro y medio debido al aumento de las temperaturas en todo el planeta.

Así lo recoge el estudio publicado en la prestigiosa revista Suistainability, donde los científicos analizaron el riesgo de inundación en La Manga del Mar Menor por la subida del nivel del mar y por otras causas naturales como la subsidencia -proceso de hundimiento vertical de una cuenca sedimentaria a consecuencia del peso de los sedimentos que se van depositando en ella-, las tormentas y los tsunamis a partir de datos históricos y registros sedimentarios antiguos en zonas cercanas.

El informe destaca que, en España, el Mar Menor cumple todas las condiciones de vulnerabilidad ante un posible aumento del nivel relativo del mar por su entorno físico, su posición geográfica y, sobre todo, su elevada presión urbanística.

Y es que, cerca de 200 millones de personas viven en áreas costeras en el mundo y se espera que esta cifra aumente a 600 millones para 2100. Sin embargo, el deshielo de los glaciares y unos océanos cada vez más cálidos están provocando un incremento del nivel del mar a escala global de 1,7 milímetros cada año. Así, playas, humedales costeros y zonas intermareales serán las más afectadas a corto plazo, y la situación no mejorará debido a la concentración urbana en áreas próximas al mar, postulan los científicos.

En concreto, en el Mar Menor, la actividad humana relacionada con el turismo de la zona ha aumentado de forma alarmante el grado de exposición de la laguna ante una inundación a corto y medio plazo. «El carácter subsidente y la porosidad del sustrato de la zona estudiada también agrava el problema», aclara el investigador en el departamento de Geología de la Universidad de Salamanca, Antonio Martínez Graña, en una información recogida por el portal científico Sinc.

Para elaborar el estudio, los expertos generaron diferentes escenarios de subida y bajada del nivel relativo del mar para varios períodos de tiempo: 100, 500 y 1.000 años desde la actualidad. De este modo, pese a que en los últimos 25 años la subida del mar se ha situado entre 1,2 y 1,5 milímetros al año, la previsión para el próximo siglo muestra un alto riesgo de inundación en playas de La Manga y en todo el perímetro del Mar Menor, a consecuencia del anunciado aumento del nivel del mar y, sobre todo, por un aumento de hasta 4,1 metros en la altura de la ola producida por las tormentas.

Según los datos del informe publicado, lo esperado para los próximos 100 años es que el nivel del mar alcance entre los 4,22 y 5,69 metros como consecuencia del incremento en la altura de la ola. «Pero podemos esperar cierta incertidumbre en nuestras predicciones», subrayan los autores.

Asimismo, el trabajo concluye que en las áreas más pobladas y turísticas el grado de vulnerabilidad es de medio a muy alto. «Existe un alto riesgo de inundación con cualquier aumento del nivel del mar», indican en el estudio. En las áreas más urbanizadas esto se produce por las características del entorno físico.

El índice de vulnerabilidad costera aplicado sirve a los científicos para advertir que hay poblaciones «particularmente vulnerables» como el sur de San Pedro del Pinatar, Santiago de la Ribera, parte del aeropuerto de San Javier, Los Alcázares, Playa Honda y complejos hoteleros y urbanizaciones del sur y centro de La Manga.

Las tormentas serán clave

Las tormentas serán claveEl investigador de la Universidad de Salamanca advierte de que un factor clave de inundación en las áreas habitadas y que podrá provocar graves daños humanos y económicos de forma repentina será la subida del nivel del mar asociada a situaciones de tormenta. «De hecho ya está ocurriendo», apunta Martínez Graña en Sinc.

Desde el estudio matizan que es precisamente esta urbanización costera la que impide la recuperación natural de la costa tras las tormentas.

Sobre el cambio climático y sus efectos en la costa murciana también se ha pronunciado en numerosas ocasiones Greenpeace. De hecho, hace unos años publicó imágenes de La Manga inundada para mostrar los efectos del deshielo del Ártico y la crecida del nivel del mar.