No es la panacea, pero sí debe cumplir «un papel importante» como recurso adicional de agua en la cuenca del Segura ante situaciones de sequía. Esta es la apuesta que se hace en el Libro Blanco de la Economía del Agua, escrito por expertos nacionales e internacionales, que fue presentado ayer en Murcia y que ha coordinado el director del Foro de la Economía del Agua, Gonzalo de la Cámara.

La desalación es una alternativa fundamental porque «es estable, programable y se sabe con qué agua se va a disponer»,dijo. Y sólo hay que abaratar el precio del metro cúbico, «algo posible» gracias a los adelantos tecnológicos.

Para los expertos es primordial reconocer que se están alcanzando límites en términos de sostenibilidad con el cambio climático (son más frecuentes e intensas las sequías y también las lluvias torrenciales). «Por eso se debe actuar de manera diferente y avanzar desde el conflicto hacia la oportunidad», dijo Delacámara. Y consideró un error las políticas de incentivos económicos «muy poderosos» para un uso del agua no siempre sostenible.

El libro es una aportación académica, explicó Delacámara, que analiza el agua «como un factor limitante del desarrollo social y económico; pero también una oportunidad para reformular los modelos productivos».

En países como España, y en cuenca como la del Segura y en regiones como Murcia, «hablamos de un valor estratégico clarísimo para pensar en las posibilidades de bienestar de las generaciones futuras», añadió.

Los expertos destacan que en la Región de Murcia hay ventajas como suelos de calidad, costes laborales competitivos y muchas horas de sol efectivas, en un contexto en el que lo que falta es agua, «es el elemento que hace la diferencia a la hora de desarrollar la economía tanto a partir de la agricultura como de la demanda de servicios turísticos, por ejemplo».

El director del Foro de la Economía del Agua comentó que la Región se ha convertido en un modelo de buenas prácticas a nivel internacional, por el esfuerzo de modernización de sistemas de regadío, y «hay una cultura muy desarrollada en relación a la necesidad de aumentar la eficiencia en el uso del agua». Sin embargo, siempre hay margen de mejora, y «en Murcia se dan las condiciones para liderar y exportar a nivel europeo el modelo de economía circular y de cómo gestionar el agua en una región árida a partir de su experiencia en reutilización de aguas residuales regeneradas».

En el libro, los expertos apuntan que es bueno recordar que España es Europa y que los problemas de escasez y las condiciones bioclimáticas que tenemos en nuestro país y Región también se dan en otras zonas del planeta, con agricultura «también muy sofisticada»; y que la gestión del agua tiene que ver con la gobernanza de la escasez en el marco del cambio climático.