La mejora de la red de ferrocarril de Cercanías en la Región y la implicación del Estado en la regeneración del Mar Menor. Esos serán los nuevos retos que se marca el nuevo delegado del Gobierno, Diego Conesa, quien en la tarde de ayer tomó posesión en el Paraninfo de la Universidad de Murcia, en esta nueva etapa, para la que prometió «diálogo», colaboración con la Comunidad y los ayuntamientos, así como especial atención para combatir «las enormes desigualdades y angustias que quitan el sueño a nuestros vecinos y vecinas».

Diego Conesa, secretario general del PSRM y candidato socialista a la presidencia de la Comunidad, estuvo arropado por el presidente del Ejecutivo regional, Fernando López Miras, el alcalde de Murcia, José Ballesta, y la presidenta de la Asamblea Regional, Rosa Peñalver, así como autoridades militares, judiciales y sociales de la Región. También por multitud de cargos públicos y militantes del PSOE, que no podían evitar la euforia por recuperar la Delegación y vitorearon en todo momento al nuevo representante del Estado en la Región.

El nuevo delegado llamó la atención sobre la desafección de la ciudadanía hacia las instituciones y prometió para esta nueva etapa «apertura, transparencia y cercanía». Avanzó que cumplirá los compromisos adoptados, uno de ellos la progresiva retirada del dispositivo policial que hay en las vías del ferrocarril en Murcia, que se colocó para evitar ataques a las obras del AVE. Precisamente vecinos de la Plataforma Pro Soterramiento, como el portavoz Joaquín Contreras, estuvieron arropando a Diego Conesa.

Durante su discurso, en el que tuvo un recuerdo para sus predecesores socialistas Ángel González (ya fallecido) y Rafael González Tovar, el nuevo delegado del Gobierno tuvo guiños «a los 4.335 servidores públicos del Estado en la Región», la mayoría de ellos pertenecientes a la Policía Nacional y la Guardia Civil, cuyo trabajo «resulta vital para defender los valores democráticos y las libertades públicas». Insistió especialmente en la lealtad institucional con la Administración regional, que está en manos del Partido Popular. «La sociedad nos está exigiendo, más que nunca, que apartemos nuestras diferencias y apostemos, decididamente, por el entendimiento, por el acuerdo. Ya les adelanto que encontrarán en mí la más sincera disposición», manifestó Conesa.

El presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, deseó suerte al nuevo delegado, «pues su suerte será la de los murcianos». El secretario general de Podemos en la Región, Óscar Urralburu, anunció «apoyo y exigencia» al nuevo Gobierno socialista, al que exigió el AVE soterrado, mientras que el portavoz de Ciudadanos, Miguel Sánchez, pidió a Conesa que no utilice la Delegación como plataforma electoral.