La Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) informó ayer favorablemente para que se prorrogue en septiembre, hasta 2019, el actual decreto de sequía a pesar de las últimas lluvias y ante la previsible disminución de las aportaciones durante este verano.
El presidente del CHS, Miguel Ángel Ródenas, reconoció que junio había sido «muy bueno» para lo que es habitual en este mes (20 litros por metro cuadrado) con aportaciones concentradas en la cabecera de la cuenca, lo que ha permitido un alivio al Segura en una situación general que ha calificado «de muy dura» porque todos los sistemas (recursos propios) «están muy agotados» tras cuatro años de sequía.
De ahí que se haya decidido pedir la prórroga en un trámite administrativo «largo» que incluirá un informe del Consejo de Estado y que tendría que aprobar definitivamene el nuevo Consejo de Ministros durante el próximo mes de septiembre.
«Hay que ser muy precavidos», advirtió Ródenas, quién señaló que el acumulado en precipitaciones del año hidrológico actual (octubre 2017 hasta la fecha) no superan los 200 l/m2.
Por su parte, el consejero de Agua, Miguel Ángel del Amor, miembro del Consejo, comentó que la prórroga será importante para la Región de Murcia teniendo en cuenta que el verano es cuando comienza el periodo de mayor consumo en abastecimiento humano y en el regadío, por lo que cuando acabe el año hidrológico en septiembre habrá que tener presente la puesta en marcha de medidas necesarias para que haya agua.
«Las previsiones de lluvia son prácticamente nulas en verano y tenemos que estar atentos a que sigan las medidas de apoyo para que los agricultores puedan sacar adelante sus cosechas», añadió.
A la espera del milagro en el Tajo
A la espera del milagro en el TajoEl presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, Lucas Jiménez, auguró dificultades para que se mantenga el nivel 2 en la cabecera del Tajo (Entrepeñas y Buendía), que permite enviar al Segura 38 hm3, aún cuando ambos pantanos almacenan 704 hectómetros cúbicos de agua, con 3 hectómetros entrando cada día.
«Necesitamos una borrasca para conseguirlo; no estamos lejos del milagro, pero lo veo muy difícil», auguró.
En cuanto a los cambios en el Ministerio, anunció una próxima reunión con el nuevo secretario de Estado encargado de los temas del agua, y mostró su satisfacción por el hecho de que el Congreso de los diputados haya aprobado recientemente para Andalucía un trasvase de agua entre dos cuencas, ya que «si es posible un trasvase en cualquier parte de este país también lo será en esta región levantina en la que, por cierto, nos hace mucha falta» el agua.