Todos los esfuerzos son pocos para evitar la llegada de vertidos al Mar Menor que puedan desestabilizar más su frágil ecosistema. En este contexto se enmarca la actividad realizada por un grupo de voluntarios de la empresa Hidrogea con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente.

Los trabajadores de la empresa de gestión de agua, junto Anse (Asociación de Naturalistas del Sureste) y la Comunidad de Regantes Arco Sur del Mar Menor, unieron sus fuerzas «para generar un ecosistema natural autóctono que ayude a frenar la escorrentía superficial y el consiguiente aporte de nitratos» a la laguna salada, explican fuentes de la empresa.

La 'Marea Azul' de Hidrogea, proyecto de Voluntariado Corporativo de la empresa, dedicó las horas y el esfuerzo de una quincena de sus empleados para luchar contra la desertificación y la eutrofización del Mar Menor, añadieron.

Los trabajadores acudieron al entorno de Cabo de Palos y los Belones (población perteneciente a la diputación del Rincón de San Ginés del municipio de Cartagena) para plantar especies autóctonas como el baladre, mirto, madroño, lavanda o palmito, propiciando con ello un ecosistema típico que entre otras cosas, contribuye a frenar la erosión del terreno y el aporte de fertilizantes al humedal.

Según explicaron desde el equipo de Anse que se encargó de dirigir esta repoblación, «con el cultivo de dichas especies vegetales a su vez se favorecerá a la conservación de las abejas y el aumento de especies depredadoras de las plagas que azotan el entorno».

La 'Marea Azul' de Hidrogea, «comprometida con el Desarrollo Sostenible, continuará con la realización de actividades que generen un impacto positivo para el cuidado del entorno natural y la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos de la Región de Murcia», indicaron fuentes de la empresa de aguas.

Además, de esta iniciativa, la nueva ley de medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad ambiental en el entorno del Mar Menor, aprobada en febrero pasado, obliga a los agricultores y empresarios que tengan sus fincas más cerca de la cuenca mar menorense a plantar estas barreras naturales, preferentemente con especies autóctonas.

Estos productores tienen un máximo de un año para realizar estos trabajos, según el plazo recogido en la Ley.

Red de filtros verdes

Red de filtros verdesPor otra parte, las consejerías de Agricultura y la de Medio Ambiente tienen en marcha dos proyectos de humedales artificiales para filtrar las aguas procedentes de las escorrentías y limpiarlas de nitratos antes de que lleguen a la laguna. Uno de ellos, el más grande, es el que se va a ubicar en la desembocadura de la rambla del Albujón y está en proceso de evaluación ambiental, tras el visto bueno del Comité Científico.

El proyecto consta en su primera fase de una superficie de 9,23 hectáreas de terreno en la desembocadura de la rambla y está diseñado para poder tratar un flujo medio de 62 litros/segundo.

Este humedal formará parte de la red que está diseñando el Gobierno regional y cuya primera actuación será la que comience a construir la Consejería de Agua en la estación depuradora de Los Alcázares. Este filtro verde se dividirá en tres zonas y procesará 15 metros cúbicos cada día. La obra se ejecutará sobre una parcela de 2.000 m2 y contará con tres humedales artificiales que ocuparán 750 metros cuadrados.