«Día histórico» fueron ayer las dos palabras más utilizadas tras la firma del Pacto Regional del Agua que acordaron PP, PSOE y Ciudadanos en la Región de Murcia.

El acto institucional se celebró en el patio del Palacio de San Esteban, al que acudieron representantes de los tres grupos firmantes (como diputados regionales, nacionales y senadores), así como alcaldes de la ribera del Mar Menor y representantes de la Federación de Municipios; todo el sector agrícola en pleno, el empresarial y el sindical.

Fernando López Miras, como presidente del Ejecutivo murciano y del PP; Diego Conesa, secretario general del PSRM-PSOE, y Miguel Sánchez, portavoz de Ciudadanos, plasmaron su firma en el acuerdo, que supone «una paréntesis a la situación convulsa» de la política nacional, dijo López Miras, en relación a la moción de censura que ha derivado en un cambio de gobierno en Madrid.

Pese a todo, el presidente regional dejó claro que este Pacto ´viajará´ a La Moncloa, porque «es la voz de la Región y nadie le puede dar la espalda». Y dijo que ya había pedido una reunión a Pedro Sánchez porque «la Región de Murcia no puede perder tiempo» de cara al Pacto Nacional del Agua: «La firma de un pacto regional demuestra responsabilidad y unidad, y es un paso fundamental, pero claramente insuficiente; es necesario un pacto nacional que aporte verdaderamente las soluciones que necesitamos».

El presidente, que quiso dedicar el Pacto especialmente al sector agrario, porque «necesitan el agua todos los días», e insistió en que «el agua aquí no sólo es vida, es empleo, prosperidad, desarrollo, economía y es, en definitiva, un elemento vital para el bienestar de nuestros ciudadanos».

El documento defiende como irrenunciable el Trasvase Tajo-Segura; apoya nuevas conexiones intra e intercuencas; el freno a los nuevos regadíos, y el aumento de la desalación, como complemento a los trasvases, entre otras cuestiones.

El líder de Ciudadanos en la Región, Miguel Sánchez, subrayó el carácter eminentemente técnico del documento, coordinado por el director del Instituto Euromediterráneo del Agua, Francisco Cabezas, quién apostó por una combinación de varias soluciones parciales de manera inteligente que aportan un conjunte viable y de costes soportables.

Sánchez recordó que hace 26 años se aprobó en la Asamblea Regional un pacto por el agua. «Hoy es el principio de una gran carrera», dijo.

Para Diego Conesa, secretario general del PSRM-PSOE, era destacable el consenso alcanzado entre las tres fuerzas políticas «anteponiendo los intereses de la Región» a los suyos propios. Y deseó que en los próximos meses, que son «importantes» para lograr el objetivo final del Pacto Nacional del Agua, «trabajemos con serenidad y buscando la estabilidad que necesita nuestra Región y nuestro país».

En el pacto sólo ha faltado la firma de Podemos, formación que considera que el documento «apuntala las ruinosas políticas de agua del PP». La diputada María Giménez criticó que el acuerdo «no habla de futuro», ni sus propuestas son realistas, sino que se basan en el «continuismo en infraestructuras hidráulicas fracasadas», como los trasvases «y no de las hídricas, que son las necesarias».