Llevan tres décadas velando ante cualquier agresión a la naturaleza. El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil cuenta con 45 personas en plantilla en la Región, aunque ahora mismo trabajan 35 profesionales que se dejan la piel «por tierra, agua y aire», explica el sargento primero de la Oficina Técnica del Seprona, José Antonio Fernández García.

Este grupo es uno de los que más abarca dentro del Instituto Armado. Se ocupan, por ejemplo, de «proteger el agua, marítima y de interiores», así como de la «protección atmosférica», señala Fernández García. También temas de sanidad alimentaria (aunque hay controles constantes, una vez al año se intensifican), el tema de «medicamentos, humanos y veterinarios», residuos, patrimonio histórico y, por supuesto, los incendios forestales.

De hecho, este asunto es el principal reto del grupo, más en estas fechas y en una Región como la murciana. En esta época se incrementa el riesgo de que se produzca un fuego en el monte, que es «una de las peores cosas que puede pasar en la naturaleza», apunta el sargento primero. De ahí que ya se haya incrementado la vigilancia. Agentes en moto van, por ejemplo, a la zona del Valle, en Murcia. Allí, además de inspeccionar, recuerdan a los excursionistas que en estas fechas hay más peligro de que arda el monte, para que lleven más cuidado. También les informan de que está prohibido hacer lumbre en el monte. «Solemos ir a horas de máximo peligro, como es el mediodía», apunta Fernández García.

También por aire va el tema de la contaminación atmosférica, otra de las competencias del Seprona. En abril de este mismo año, recuerda Fernández García, la Benemérita llevaba a cabo la operación ´No Frost´, para esclarecer la venta irregular de numerosos electrodomésticos. Se inmovilizaron miles de residuos peligrosos en un recinto ilegal de Las Torres de Cotillas.

Por tierra, un asunto en boga es el del maltrato animal. «La gente se está concienciando mucho y eso nos ayuda», precisa el sargento primero al respecto.

El delito relativo a la protección de los animales domésticos (maltrato animal) se encuentra recogido en la reciente reforma del Código Penal, que lo define como el hecho de maltratar injustificadamente a los animales, mediante cualquier medio o procedimiento, causándoles lesiones que menoscaben gravemente su salud o la muerte. Las penas van de tres a dieciocho meses de prisión. También se contempla la inhabilitación especial de uno a cuatro años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y para la tenencia de los mismos.

Se persigue, asimismo, el tráfico de especies protegidas.

En febrero de este año, la Guardia Civil desmantelaba un criadero ilegal de tortugas en un domicilio de la localidad de San Pedro del Pinatar, y arrestaba al dueño. Resulta que tenía en su casa 89 especímenes, cuatro caparazones y cinco huevos de las especies Testudo Marginata, Testudo Hermanni, Aldabrachelys Gigantea, Astrochelys Radiata y Stigmochelys Pardalis, cuya tenencia, reproducción en cautividad y comercialización, sin autorización, está prohibida.

«El Código Penal cada vez protege más a los animales, no sólo a perros y gatos: a equinos, a animales de producción», señala Fernández García. Aunque en la Región de Murcia, hasta el momento, no ha pisado nadie la cárcel por maltratar a una mascota, en Baleares sí ha ocurrido.

El Seprona de la Quinta Zona de la Guardia Civil cuenta con distintas unidades repartidas por la Región. No hay equipo sólo en Murcia: están en Abarán, Caravaca de la Cruz, Jumilla, Torre Pacheco, Cartagena, Lorca, Alhama de Murcia y Águilas.

Se trata de personal «muy especializado» que, además de haber hecho en su día el curso para el Seprona, están en constante formación, dado que las leyes relacionadas con el medio ambiente cambian muchas veces. Además, han de ir «actualizándose», porque hay normativa «internacional, europea, nacional y autonómica», relata Fernández García.

En la Región de Murcia, la media de edad de los miembros del Seprona es de 50 años, por lo que una de sus bazas es «la experiencia».

Los equipos del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Región están a la cabeza del país. Y es que «Murcia y Málaga tienen a los mejores ´seproneros´ de España», dicen los datos de la Jefatura y recuerda el sargento. Y es así «por las operaciones y los servicios que se realizan a lo largo del año», manifiesta.

El Seprona celebrará con un acto en Madrid los 30 años desde su creación en toda España, también en Murcia. Antes funcionaban las patrullas rurales todoterreno motorizadas.

José Antonio Fernández García valora, por otra parte, la colaboración «de la Administración regional y local», ya que, siempre que la Benemérita necesita especialistas, «nos echan una mano». Además, anima al ciudadano de a pie «a que nos siga ayudando».

El pasado mes de abril, el Gobierno del Partido Popular concedía la Placa de Oro de la Orden Civil del Mérito Medioambiental al Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil. La distinción fue aprobada en el Consejo de Ministros.