El Corte Inglés baraja como una posibilidad convocar un consejo extraordinario para estudiar la continuidad o la salida de Dimas Gimeno de la presidencia, indicaron a Europa Press fuentes jurídicas. En el marco de la disputa familiar que amenaza la permanencia de Gimeno al frente del grupo de grandes almacenes se abre a corto plazo un abanico de tres posibilidades, cualquiera de las cuales podría prosperar.

La primera es que el propio Dimas Gimeno presente a iniciativa propia su dimisión al constatar su posición de debilidad en el consejo. No se descarta que esta opción se materialice en las próximas semanas.

La segunda posibilidad es que el relevo del actual presidente se incluya en la reunión del consejo de administración prevista para el próximo 30 de este mes, que tiene carácter ordinario y que está convocada para aprobar las cuentas del grupo en 2017. Fuentes de El Corte Inglés consultadas por Europa Press explicaron que aunque el asunto del relevo en la presidencia no figura en el orden del día del consejo, el propio Dimas Gimeno, en calidad de presidente del mismo, tiene potestad para incluirla.

La tercera posibilidad es la convocatoria de un consejo extraordinario para abordar el cese del actual presidente y el nombramiento de uno nuevo. Según las mismas fuentes jurídicas, Dimas Gimeno tiene muy complicada su continuidad al tener una posición minoritaria.

Fractura en la familia

La fractura entre las dos hijas del anterior dirigente de El Corte Inglés, Isidoro Álvarez, y el sobrino y sucesor de este en la presidencia, Dimas Gimeno, y las cuatro demandas judiciales que han planteado desde octubre los hermanos de Isidoro Álvarez (César y María Antonia, tío y madre de Gimeno) contra sus sobrinas (Marta y Cristina Álvarez), han liberado un enconado enfrentamiento en el seno de la rama de la familia fundadora de El Corte Inglés que se había hecho desde 1989 con la hegemonía en el negocio, la mayor organización europea de grandes almacenes y cuarta del planeta.

El conflicto que vive El Corte Inglés emana de la herencia del tercer presidente, Isidoro Álvarez, quien sustituyó a su sobrino, Dimas Gimeno, hijo de su hermana María Antonia, como sucesor en la presidencia del grupo pero sin dotarlo del respaldo accionarial del que sí gozaron los tres dirigentes anteriores. Sin este blindaje, y con una mayor juventud y más corto recorrido en la casa que sus antecesores, la presidencia de Gimeno nació débil en septiembre de 2014. Isidoro Álvarez había transferido en vida sus acciones (el 22,18% de El Corte Inglés) a la sociedad de cartera IASA, de la que otorgó en herencia más de dos tercios (69%) a sus hijas adoptivas (Marta y Cristina Álvarez Guil) y el 3% lo repartió entre sus hermanos y sobrinos.

Los principales accionistas de El Corte Inglés son la Fundación Ramón Areces, con un 37,39%; Cartera de Valores IASA, sociedad patrimonial controlada por las hermanas Marta y Cristina Álvarez, con un 22,18%; Mancor -vinculada a la familia García Miranda- (7%); Ceslar -familia Areces- (9%), y Primecin -vinculada al jeque catarí Sheikh Hamad Bin Jassim Bin Jaber Al Thani, que en la próxima junta pasará a ostentar entre el 10% y el 12% del capital.

Una posición "débil"

Tanto desde el punto de vista de los integrantes del consejo de administración como de la representación accionarial en la junta general de accionistas, la posición de Gimeno se antoja "extremadamente débil", explican las mismas fuentes jurídicas, lo que hace prácticamente inviable su continuidad.

En cualquier caso, esta contingencia en la cúpula de El Corte Inglés no supone ningún tipo de amenaza a la situación empresarial del grupo, al tratarse de una compañía financiera y patrimonialmente sólida que no tiene sobreendeudamiento, que cuenta con una amplía cartera de activos, y cuyas cuentas están saneadas, según indicaron a Europa Press en fuentes financieras.