El empleo en la Región es como una moneda. Tiene una cara y una cruz. El dato positivo es que Murcia ha recuperado ya las cifras de puestos de trabajo indefinidos que se registraban antes de la crisis económica y de empleo, según la estadística hecha pública ayer por el INE. Sin embargo, la nota negativa llegó desde la Asamblea Regional, donde compareció en la Comisión de Empleo, el secretario regional de UGT. Antonio Jiménez alertó de una precarización «injustificada» del trabajo, ya que en 2017 se firmaron un millón de contratos temporales.

Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) revelan que hoy se contabilizan en la Región 319.900 trabajadores con un contrato fijo, 4.300 más que a la conclusión del segundo trimestre de 2007, tramo previo al comienzo de la crisis, cuando eran 315.600. El 'suelo' de trabajadores ocupados con contrato estable en la Región durante la crisis se alcanzó tras el tercer trimestre del año 2013, cuando el número descendió hasta los 284.500. Así, se pone de manifiesto que desde el inicio de la crisis hasta ese punto álgido de la destrucción de empleo se perdieron 31.100 puestos de trabajo indefinidos, mientras que desde el inicio de la recuperación se ha superado esa cifra y se han generado 35.400 nuevos empleos fijos. El dato medio del país sigue una tendencia similar, y la recuperación de empleo estable también ha sobrepasado la marca registrada en ese segundo trimestre de 2007, que se considera como último indicador previo a la crisis. Concretamente, España cuenta hoy con 11.670.400 trabajadores ocupados con contrato indefinido, cuando once años atrás eran 11.590.800, es decir, 79.600 menos. Otro factor a tener en cuenta es la proporción que suponen actualmente los trabajadores fijos en la Región de Murcia sobre el total de ocupados, y a cuánto ascendía ese porcentaje antes de la crisis. En este caso, los datos del INE reflejan que hoy esa proporción asciende al 64,7 por ciento, mientras que tras el segundo trimestre de 2007 era del 58,8 por ciento. De esta manera, se concluye que casi dos de cada tres empleos actuales en la Región son indefinidos, y que antes de la crisis existía una cifra total de trabajadores (644.200) mayor que la actual (586.400), pero también era superior la temporalidad y por tanto los puestos de trabajo gozaban de menos estabilidad. Para el consejero de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente, Javier Celdrán, estas cifras muestran que «la creación de puestos de trabajo no sólo se está produciendo de manera cuantitativa, sino que la calidad de ese empleo es cada vez mayor. Es un hecho que el empleo de la recuperación es de mayor calidad que el que se fue con la crisis».

Mientras el consejero de Empleo hacía esta valoración, el secretario regional de UGT exponía en la Asamblea que el 32% de los contratos temporales que se firmaron fueron con una duración menor de un mes. «Se acorta el tiempo de la contratación en una precarización temporalizada. Es una precarización injustificada, también tenemos un mercado de trabajo que discrimina y excluye a los parados de larga duración», afirmó. En ese sentido, también señaló que el tamaño de las empresas «no justifica la temporalidad más que el fraude» por lo que pide medidas que reduzcan la tasa de temporalidad. «Tenemos la tercera tasa de temporalidad más alta del país», remarcó.

Aparte de eso, se mostró preocupado por los parados de larga duración que «cada vez tienen menos prestaciones» y con el colectivo de mujeres que sufren «discriminación en el mercado de trabajo. La tasa de paro de la mujer sobrepasa en más de seis puntos a la de los hombres». Por otro lado, aludió al índice de siniestralidad que cuenta con un incremento del 5,5% en los accidentes de trabajo y un 21% en las enfermedades profesionales.

Por parte de los grupos parlamentarios, el diputado de Ciudadanos Miguel Ángel López Morell indicó que el mercado laboral está «muy enfermo y precario» considerando que se «abusa» de las empresas de trabajo temporal. Él solucionaría el problema de los contratos temporales con un contrato único en el que habría una indemnización proporcional al tiempo trabajado. Desde el PSOE, Antonio Guillamón manifestó que la reforma de Rajoy supuso un «retroceso claro para la estabilidad y la calidad del empleo». En cuanto a Podemos, Andrés Pedreño dijo que no es cierto que se estén recuperando contratos de trabajo; «se está fomentando la precariedad», añadió. El 'popular' José Soria no compartió la descripción del mercado laboral de UGT y destacó que hay más de 50.000 empleados que hace 5 años, que se crean 92 puestos de trabajo al día.