La tasa de fraude al seguro en España aumentó hasta el 1,73% en 2017, lo que supone cerca de 20.000 casos detectados entre un millón de siniestros reclamados por los clientes, cuyas indemnizaciones fraudulentas evitadas por parte de la aseguradora AXA le ahorraron desembolsar casi 63 millones de euros a los defraudadores, un 6% más de lo que se evitó en 2016.

Según el último 'Mapa AXA del Fraude en España', estos 20.000 intentos de fraude detectados suponen un 9,3% más que el año anterior, si bien los siniestros falsos no dejaron de aumentar en los últimos seis años, después de pasar del 1% del total de siniestros en 2012 al 1,73% en 2017.

Las reclamaciones falsas en el seguro de Auto concentraron más del 60% de todos los intentos de fraude. Las versiones adulteradas durante la conducción coparon hasta el 88% de estas reclamaciones, mientras que el robo, la rotura de lunas o los factores atmosféricos fueron la supuesta causa del restante 12%.

Por su parte, el 30% de los fraudes perteneció al ramo de Multirriesgo, que incluye el hogar, comercio, oficinas y comunidades, de los que el 41% reclamó daños ocasionados por el agua y el 27% por daños eléctricos para la renovación de electrodomésticos.

El 10% restante correspondió a seguros de responsabilidad civil, transporte, industrias, salud, accidentes y vida, donde se reclamaron accidentes falsos, se ocultaron enfermedades antes de suscribir el seguro, se fingió la muerte o se hizo pasar un suicidio como si fuera un accidente.

El 55% de los casos son ocasionales.

En cuanto a la tipología del fraude, hasta el 55% de las reclamaciones falsas fue de tipo ocasional, es decir, aquellas interpuestas puntualmente y sin premeditación, que en su mayoría (65%) no sobrepasan los 600 euros.

En solo un año, este tipo de fraude ha pasado de suponer el 52% del total al 55%, una aumento contrario a la tendencia registrada en los años anteriores, algo que, según el estudio, estuvo condicionado por una cierta recuperación económica.

Por su parte, los siniestros falsos planificados con antelación concentraron el 41% del total, seguidos por los llevados a cabo por bandas o tramas organizadas, que coparon el 3%, después de crecer un 20% en el último año.

Consecuencias del fraude de las primas.

La detección de los casos de fraude, que el año pasado le evitaron a AXA el pago de 63 millones de euros por indemnizaciones falsas, también tiene un impacto en la prima que pagan el resto de clientes que no cometen fraude.

La rama aseguradora más afectada por las reclamaciones es la de Responsabilidad Civil, ya que sus primas podrían aumentar hasta un 17% como consecuencia de mayores gastos en indemnizaciones. Las de Accidentes podrían subir un 10% o las de Auto, un 5%.

Según el informe de AXA, las condenas de cárcel declaradas por los tribunales respecto a estos fraudes crecieron un 17% y hasta el 88% de las reclamaciones tuvo consecuencias penales para los defraudadores detectados.

La tasa en Madrid fue de solo el 0,8%.

En el ámbito territorial español, las diferencias volvieron a quedar patentes el pasado año. Mientras que en el interior del país la tasa de fraude fiscal se distanció menos del dato nacional, en la periferia el fraude quedó más patente, excepto en Cataluña, Baleares y País Vasco, donde las tasas fueron del 1,4%, 1,6% y 1%, respectivamente.

La ciudad autónoma de Melilla (5%), Murcia (2,7%), Andalucía (2,6%) y Canarias (2,5%) fueron las regiones con mayor fraude en los seguros. Por encima del 1,7% de media del país también estuvieron Galicia (2,2%), Asturias (2,1%), Navarra (2,1%), Cantabria (1,9%), Castilla y León (1,8%), La Rioja (1,85) y Ceuta (1,8%).

Por el contrario, Madrid (0,8%), Castilla La Mancha (1,4%), Aragón (1,5%) y Extremadura (1,7%) registraron las tasas más bajas del país.