Cuando el frío aprieta, los comercios ven la oportunidad de hacer caja con la venta de ropa de abrigo. El clima se convierte en aliado de los negocios y ayuda a mejorar las cuentas a final de mes. Sobre todo si las bajas temperaturas coinciden, como esta última semana, con los días finales de las segundas rebajas.

Las ventas de abrigos, jerseys y anoraks este año «han sido flojitas hasta hace unas semanas», indica Carmen Piñero, presidenta de la Asociación de comerciantes Triángulo de Murcia. Además, según explica Piñero, aunque el periodo de rebajas ha funcionado mejor que el año pasado, «hasta hace unos días no estaba habiendo alegría en el pequeño y mediano comercio». Sin embargo, «la combinación de rebajas con el frío de los últimos quince días ha ayudado a que la gente se anime a renovar los chaquetones, la ropa de abrigo, el calzado y los complementos de invierno».

Antonio Sánchez, presidente de la Asociación de Comerciantes del Casco Antiguo de Cartagena, explica que los clientes están aprovechando estos últimos días de rebajas para comprar prendas de abrigo. «Lógicamente, hasta el momento no ha hecho falta porque hemos tenido un tiempo muy benévolo. Hasta enero no ha habido necesidad de abrigos ni chaquetones. Este año el tiempo está muy loco», señala Sánchez.

«Al final, uno compra cuando tiene necesidad. Así que, ahora que estamos con este frío encima, la gente está aprovechando para adquirir prendas que aún no habían necesitado. En comparación con el año pasado, la venta de prendas de abrigo está yendo mejor y para los clientes está saliendo a cuenta porque ha coincidido con el periodo de rebajas», explica Sánchez.

Nadie quiere comprar un abrigo cuando aún va en mangas de camisa. Sin embargo, este año, el frío ha tenido el efecto contrario en algunas zonas del interior, del Noroeste y del Altiplano, así como en la propia ciudad de Murcia durante algunos días: «Nadie quiere comprar un abrigo cuando aún va en mangas de camisa, pero tampoco cuando el viento helado le corta la cara», como explica Juan Antonio García, presidente de la Asociación de Comerciantes Carmelitanos del Barrio del Carmen, en Murcia.

García indica que está siendo «un poco paradójica la situación de este año: el frío hace que la gente se anime a comprar prendas de temporada. Pero el exceso de frío que ha habido, para el que no estamos acostumbrados los murcianos, ha hecho que se retraigan las ventas un par de días puntuales, porque la gente prefiere irse a casa a resguardarse».

Así, reconoce que el frío ha incrementado las ventas, pero que la bajada brusca del mercurio «está congelando las ventas. En Cehegín o Abarán, por ejemplo, en cuanto el sol cae, la gente se va de la calle. Salen solo a comprar lo necesario, nada de ir viendo comercios».

«Las rebajas han ido mejor este año que el pasado. Y en general, la gente se ha animado más a comprar. Sobre todo las ventas han aumentado en el sector infantil, porque los niños van creciendo y necesitan chaquetones más grandes. Este año ha hecho más frío que el anterior, y nos ha venido bien», destaca el presidente de los comerciantes del Barrio del Carmen.

Los comerciantes destacan que «el pequeño y mediano comercio debe tener más ayudas y más apoyo de las instituciones. Estamos en desventaja. Ya sea con el horario comercial, como con el clima. Cuando hace frío, los clientes prefieren acudir a los centros comerciales, que suelen ser cerrados. Y eso perjudica a todos, porque el dinero del negocio local se revierte en la ciudad».