El presidente de la CROEM, José María Albarracín, no se será candidato a la presidencia de la Cámara de Murcia, tal y como publicaba ayer La Opinión, pero su estrategia ha conseguido blindar las listas al pleno de la corporación, dejando fuera de juego a los demás aspirantes que pudieran estar pensando en presentarse. Cualquier otro candidato solo tendría posibilidad de conseguir algún puesto en el pleno de la corporación, pero sin posibilidades de recabar apoyos para optar a la presidencia ni a los órganos de dirección.

Al menos dos otros dos empresarios, el exdirigente del Metal Salvador Huertas y la expresidenta de Hostemur Soledad Díaz, habían expresado públicamente su deseo de optar a la Cámara durante los últimos años, aunque ninguno de ellos se plantea ya presentarse para competir con las candidaturas avaladas por José María Albarracín.

El presidente de la CROEM ha mantenido la incógnita sobre sus planes hasta una semana antes de que se cierre el plazo para presentar candidaturas, aunque a finales de enero ya manifestó en un acto de la Asociación Murciana de la Empresa Familiar (Amefmur) que continuará al frente de la CROEM dos años o tres más.

A partir de estonces se planteará optar a la presidencia de la Cámara de Comercio. No descarta incluso que el candidato designado para presidir la corporación a partir de mayo pudiera sucederle después al frente de la patronal, lo que complica la designación del presidente de la corporación que tiene su sede en la plaza San Bartolomé de Murcia.

Este planteamiento ha causado sorpresa entre los empresarios murcianos, que aguardan con expectación la lista de los 12 miembros del pleno que ha elaborado Albarracín.

Aunque en algún momento llegó a plantearse la posibilidad de compaginar la presidencia de la Confederación de Organizaciones Empresariales con la de la Cámara de Comercio, finalmente ha descartado esta posibilidad, aunque el respeto adquirido por Albarracín tras cuatro años de gestión en la patronal -a la que ha sacado de la bancarrota económica- le habrían permitido hacer doblete.

La estrategia seguida por el presidente de la CROEM para blindar las candidaturas incluso puede evitar que los empresarios tengan que ir a las urnas el próximo día 26 de abril, dado que en las ramas de actividad en las que se presente una sola candidatura ni siquiera llegarían a celebrarse los comicios. De esta forma, aunque el plazo de presentación de candidaturas termina el próximo martes, si para entonces no hay listas alternativas, quedarán confirmadas las listas pactadas.

La mayor parte de las organizaciones empresariales han presentado ya a sus candidatos. El apoyo de las federaciones empresariales que los respaldan reducen al mínimo las posibilidades de conseguir un puesto en el pleno a cualquier otro aspirante, aunque hasta el día 13 no podrá descartarse que alguno quiera intentarlo.

La Cámara de Comercio de Murcia ha convocado elecciones para el próximo 26 de abril para elegir a 34 vocales que representarán en el pleno a las 26 ramas de actividad, a los que se sumarán los 12 vocales designados por la CROEM, entre los cuales estará Albarracín, que no optar a la presidencia de la corporación cameral en este momento. Desde que se dieron a conocer los censos electorales, ha negociado uno a uno los nombre de los candidatos a los 34 asientos del pleno.