Un 35,6% de los trabajadores ocupados en la Región posee estudios superiores, la mayor proporción en la presente década. Concretamente, la última Encuesta de Población Activa (EPA) refleja que 207.200 de los 582.500 trabajadores estimados en la Región poseen estudios universitarios o de Formación Profesional superior.

El incremento en el peso de estos trabajadores sobre el total se viene produciendo durante todo 2017. En el primer trimestre la proporción era del 33,8%, para pasar al 34,1% a la conclusión del segundo trimestre. Finalmente, el último dato, el del tercer trimestre, arroja una subida de más de un punto y la mejor cifra de la última década.

En términos absolutos, existe un equilibrio en el reparto por sexos de estos trabajadores, ya que el 50,7% son varones (105.000) y el 49,3% mujeres (102.200). Sin embargo, la proporción varía en relación a los estudios que presentan el resto de hombres y mujeres. Así, cuatro de cada diez mujeres que trabajan poseen estudios superiores, mientras que entre los hombres son tres de cada diez (un 31,6%).

Este nivel formativo es el predominante en el volumen de trabajadores de la Región, por delante de los que tienen hasta primera etapa de educación secundaria. A continuación se encuentra el 22,2 por ciento que ha alcanzado la segunda etapa de educación secundaria o la FP no superior.