Ellos también sufren cáncer de mama, aunque, con los datos en la mano, pueda resultar una rareza. Apenas el 2 por ciento de los tumores se desarrollan en un pecho masculino, lo cual no quiere decir que no puedan darse. A los hombres también les puede ocurrir y, ante la aparición de un bulto sospechoso en el pecho, han de acudir al médico. A José le pasó.

«Estoy estupéndamente. Sigo con revisiones, pero tengo el alta... digamos, casi». Así se expresa José Carrasco, párroco del templo de Nuestra Señora del Carmen de Murcia a la hora de hablar del cáncer de mama que padeció. «Dicen que es uno cada diez hombres, y me tocó en suerte», señala. El sacerdote, natural de Alcantarilla y actualmente ecónomo del Obispado de Cartagena, admite que, cuando le dieron el diagnótsico, se llevó «un susto, como todo el mundo». «Te sientes desconcertado», subraya, «aunque una persona como yo, que soy creyente y hombre de fe, sabe que su vida está en manos de Dios». El cura explica que no llegó a caer en una depresión «porque tenía donde agarrarme», en referencia al Catolicismo. Su fe actuó a modo de medicina, «sin despreciar a la otra medicina», apostilla.

También valora Carrasco «la cercanía y ayuda de mi familia». «De algunos feligreses también, pero especialmente de mi familia, que me estuvo velando día y noche en el hospital», resalta.

En medio de la lucha contra el cáncer, el religioso se tuvo que enfrentar a otra dolencia. Y es que «terminé las sesiones de quimio y me diagnosticaron pancreatitis». «Yo pensé: ´¿El pancreas? Me despido´. Y fueron más días de hospital, y volví a contar con la ayuda de mi familia, porque no me podía mover de la cama», manifiesta.

A las personas que hoy en día siguen batallando contra el cáncer de mama, José Carrasco les aconseja «que luchen con esperanza, que sean hombres y mujeres de fe, que aviven esa llama, la de la fe, porque Dios está más cerca de nosotros en los momentos de sufrimiento».

La única diferencia sustancial es que en el caso del varón no se hacen cirugías conservadoras: la mastectomía siempre es radical.