Íñigo de la Serna (Bilbao, 1971, santanderino de adopción), recorría hace unos días la nueva vía del AVE entre Elche y El Reguerón (Murcia) y se entrevistó con los vecinos de la Plataforma Pro Soterramiento antes de las protestas sobre las vías que fueron contestadas con la intervención de la Policía. Esta entrevista se realizó antes de los acontecimientos del fin de semana y de los alternados que se han saldado con dos detenciones. De la Serna es ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, licenciado por la Universidad de Cantabria en la especialidad de Hidráulica, Oceanografía y Medio Ambiente. Tras un breve paso (1995-1999) por la empresa de ingeniería Apia XXI dio el salto a la política como director de gabinete del consejero de Medio Ambiente de Cantabria de 1999 a 2003. Fue cuatro años edil de Medio Ambiente, Agua y Playas del Ayuntamiento de Santander (2003-2007) y alcalde desde 2007 a 2016. De 2012 a 2015 presidió la Federación Española de municipios y provincias (FEMP).

¿Qué es para usted el Corredor Mediterráneo?

Puedo decir lo que digo todos los días, porque no hay día, prácticamente, que no hable de esto. Es una prioridad social, económica y política para el Gobierno de España. Y puedo decir que es una infraestructura de las que vertebran el territorio. Justa en la medida que une poblaciones y sectores productivos que representan una gran parte de nuestro PIB, y una red que forma parte de nuestros compromisos también europeos.

Bruselas reclama que quitemos camiones de las carreteras y los pongamos en las vías.

Europa nos está pidiendo que trabajemos en el Corredor Mediterráneo y creo que tenemos ahora razones más que suficientes para decir que estamos actuando en todos y cada uno de los puntos del Corredor en diferentes trámites administrativos, y en todos con la mayor celeridad posible. Recientemente, tuve un encuentro con la ministra de Transporte francesa y es bueno también que Europa entienda que hay otros países que tienen que hacer esfuerzos importantes también para dar continuidad al Corredor.

¿No cree que se perdió el tiempo de las vacas gordas, cuando la economía funcionaba bien, y ahora tenemos que hacer cosas a remolque y con estrecheces?

España ha tenido un salto espectacular en infraestructuras. Somos el segundo país con mayor extensión de Alta Velocidad del mundo. Una red de carreteras y autopistas de primer nivel en Europa, primer gestor aeroportuario del mundo... Yo creo que hay cifras que claramente marcan un salto cualitativo gigantesco en materia de infraestructuras. Hay autonomías donde todavía hay que hacer un esfuerzo importante. Por ejemplo en Cantabria, mi tierra, donde no hay ni un sólo metro de Alta Velocidad.

Ningún ministro viene tanto como usted.

Y más que voy a venir. Eso es señal de que tenemos cosas que decir. Hemos supervisado la plataforma de Alta Velocidad de Elche a Murcia y vamos a seguir viniendo. Espero venir cuanto podamos para poder presenciar el inicio de las obras del acceso al aeropuerto de Alicante-Elche.

En Levante hay movimientos sociales por el Corredor Mediterráneo que no se han producido en otras partes del territorio a favor de otros corredores.

No es el único caso. En el Norte se están reuniendo las cámaras de comercio y los grupos empresariales para potenciar una red ferroviaria de todo el Cantábrico. En el Corredor hay un esfuerzo probado de inversión y de trabajo. Es algo que venimos aquí a contar para ser evaluados. Lanzamos compromisos, aunque algunos no gusten nada, cuando se dicen inicialmente, pero luego volvemos para decir hemos hecho esto, hemos dado este paso y no hemos cumplido este otro. Y, sinceramente, de momento los incumplimientos son muy escasos. Estamos tratando de cumplir todo lo que decimos lo que pasa es que no decimos nada que no creamos que se va a cumplir, y con el Corredor Mediterráneo ha pasado eso. Yo fuí a la asamblea de AVE (Asociación Valenciana de Empresarios, promotora de la cumbre celebrada en Murcia el pasado marzo ) a dar la cara y a dar cuenta de cuál era la situación de cada uno de los tramos. Durante casi una hora la expliqué con muchísimo detalle y creo poder decir que estamos cumpliendo todo lo que hemos dicho. También tengo que decir que los empresarios de AVE han reconocido que se está cumpliendo ese esfuerzo. ¿Que van a seguir reivindicando? A mí me parece muy bien.

¿ Va a ser el ministro que logre acabar los tramos del AVE empantanados a lo largo del Corredor Mediterráneo?

En el tramo Castellón-Vandellós hemos tenido que rescindir contratos porque no había capacidad legal para continuar las obras con el modificado y estamos ya redactando los pliegos para cumplir ese compromiso que tenemos de finales del 2019. Estamos también en el Castellón-Valencia para ponerlo en marcha. E inmediatamente que se ponga en marcha el tren vamos a colocar el tercer carril en la otra vía. De Valencia a Xàtiva-La Encina también tenemos un escenario de acabar en el año 2019 y creo recordar que era el tercer trimestre de 2019. De ahí a Monforte del Cid- Murcia entraremos ahora en el 2017, y de hecho acabamos de ir para coger un tren de pruebas desde Elche y hacer el recorrido completo hasta El Reguerón.

¿Para cuándo se estrenará la línea a Madrid?

Las obras acaban antes de que finalice este año. Hemos tenido que desbloquear muchos proyectos pero las obras finalizan este año. A partir de ahí empieza la circulación en pruebas. Debe entrar la Agencia de Seguridad Ferroviaria y es necesario desarrollar una batería de actuaciones para la certificación de la seguridad. Un proceso que dura unos meses y que depende de unos técnicos.

¿Seis meses, un año?

No puedo poner fecha. Por ejemplo, en el Valencia-Castellón se tarda más tiempo que en otras líneas porque hay elementos nuevos e innovadores. El tramo Elche-Murcia es más sencillo.

En el sur de la provincia de Alicante sigue pendiente el desdoblamiento de la N-332. El Ministerio ha anunciado ahora que asume el estudio informativo.

El compromiso era que la Generalitat (Valenciana) redactara el proyecto pero se echaron atrás en su compromiso. Ahora hemos sido nosotros los que vamos a asumir el proyecto y eso va a llevar un proceso. Así lo hemos trasladado a la Generalitat y al Ayuntamiento de Alicante. Por eso en los presupuestos de 2018 el presupuesto será pequeño porque será para tramitar la declaración ambiental y eso lleva entre seis y ocho meses, y que tenemos retomar muchos temas.