Las reformas legislativas que llevaron a la integración de las empleadas de hogar en el Régimen General de la Seguridad Social no han dado los resultados esperados, dado que la mayor parte de ellas sigue trabajando en la economía sumergida. Apenas dos de cada cinco trabajadoras están dadas de alta en la Región, según los cálculos de UGT. La secretaria de Política Social y Seguridad Social del sindicato, Eugenia Pérez Parra, considera que «los bajos salarios, establecidos por ley en un mínimo de 5,54 euros por hora», y la imposibilidad de cobrar el paro en caso de despido las someten a unas condiciones tan «precarias», que desincentivan la salida de la economía sumergida.

Eugenia Pérez Parra recordó igualmente que los empleadores no están obligados a darles de alta en la Seguridad Social si trabajan un número de horas equivalente a menos de 60 euros al mes, lo que acrecienta las dificultades para muchas mujeres que realizan un reducido número de horas en varias casas.

La cifra de empleadas de hogar afiliadas en la Región se sitúa en torno a las 11.900, lo que supone 3.000 más que en el año 2010. El número máximo de afiliadas se alcanzó en 2013, tras su integración en le Régimen General dentro de un sistema especial, cuando se superaron por primera vez las 12.000 cotizantes de alta, pero a partir de 2014 se ha situado por debajo.

Eugenia Pérez Parra recordó que la Ley de la Dependencia también había creado grandes expectativas de sacar de la economía sumergida a muchas trabajadoras que se ocupan del cuidado de personas mayores y de discapacitados, pero las esperanzas se truncaron cuando el Gobierno eliminó las cotizaciones gratuitas de las cuidadoras.

En España el pasado mes de junio había 424.395 personas cotizando como empleadas de hogar, después de haber superado las 428.000 en 2015. La vicesecretaria general de UGT, Cristina Antoñanzas, estima que en todo el país están dadas de alta dos de cada tres empleadas de hogar, una proporción que no se alcanza en Murcia. La escasa afiliación es uno de los asuntos que, a su juicio, deben revisarse de cara al fin del periodo de aplicación del sistema especial, el próximo 1 de enero de 2019, momento a partir del cual el tipo de cotización y la distribución entre empleador y empleado serán las establecidas para el Régimen General.