«El verano va a ser caliente y muy seco». Así lo expresó ayer el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), Lucas Jiménez, que se reunió con el presidente murciano Fernando López Miras y el consejero de Agricultura, Francisco Jódar, en San Esteban, para exponer la dura situación a la que se enfrenta el sector agrícola murciano por la falta de agua. Y advirtió que de no haber noticias en un par de semanas sobre la aperturas de pozos de sequía de la Vega Alta y del Sinclinal de Calasparra, habrá movilizaciones.

«Estamos mucho peor que el año pasado» por estas fechas, comentó, y explicó que en primavera a los pantanos de la cabecera del Tajo llegaron entre 170 y 200 hm3 que permitieron recibir trasvases durante toda el verano. Ahora no se espera ningún envío para riego desde este mes. Los pantanos acogen actualmente 373 hm3 de agua, a tan sólo 5 de lo que técnicamente se conoce como 'trasvase cero' (368 hm3).

Jiménez ha sido el primero en ser recibido oficialmente por López Miras desde que éste fue nombrado presidente de Murcia y le expuso al jefe del ejecutivo la necesidad de presionar ante Madrid, «porque es allí donde están las competencias en materia de Agua», y lograr que el Ministerio de Agricultura prorrogase el decreto de sequía a partir de septiembre y agilizase los trámites para que el regadío disponga de algo de agua este verano de recursos alternativos.

El presidente del Scrats enumeró varias posibles fuentes, como entre 21 y 26 hectómetros de la desaladora de Torrevieja (Alicante); 25 hm3 de los pozos del Sinclinal; poder utilizar el agua desalada que el abastecimiento no vaya a utilizar y que los contratos de cesiones de agua de comunidades de regantes de la cabecera del Tajo, como Estremera, que les venderían 8 hm3, se autoricen con rapidez. En total, «y si todas las negociaciones salen bien», podrían tener unos 70 hm3 de agua hasta el 30 de septiembre, menos de la mitad de lo que necesitan los agricultores.

Enmienda del PP

Por su parte, el consejero de Agricultura, Francisco Jódar, destacó tras la reunión que los diputados murcianos habían introducido una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado para dotar con 4 millones de euro la subvenciona al agua desalada que permita poner un 'precio social' para su destino a la agricultura.

El consejero destacó cinco desafíos que en materia de agua tiene el nuevo Ejecutivo: El «blindaje» del trasvase y su redotación; la creación de un banco público del agua; la interconexión de todas las desaladoras; un precio social del agua desalada e impulsar el gran pacto nacional del agua.

A este respecto, el presidente del Scrats ya había comentado que estas medidas sin infraestructuras que lo sustenten no son más que «cantos de sirena» y «conceptos bonitos».