Juan Hernández Albarracín, que ayer asumía la Consejería de Empleo, Universidades y Empresa, explicó que sus nuevas competencias incluyen también la investigación, con el propósito de «acercar la innovación tecnológica y el desarrollo de I+D+i a las empresas».

Hernández Albarracín era titular desde julio de 2015 del Departamento de Desarrollo Económico, Turismo y Empleo. La remodelación ha supuesto la fusión de Turismo con Cultura y Medio Ambiente. El responsable de Empleo enumeró los tres grandes ejes de su gestión, que estarán centrados principalmente en la mejora de la calidad del empleo, mediate la aplicación del acuerdo alcanzado con la patronal y los sindicatos; y las reformas destinadas a potenciar «el crecimiento enconómico y la libertad económica para facilitar el desarrollo de todos los sectores productivos de la Región». El tercer eje de su gestión estará orientado a la mejora de la innovación y «la formación de los recursos humanos» para acercar el desarrollo tecnológico a las necesidades de las empresas murcianas.

Hernández destacó que el primer objetivo de su Consejería para la segunda mitad de la legislatura sigue siendo «potenciar el empleo» y facilitar la generación de «empleo de calidad», dando cumplimiento a la Estrategia por el Empleo firmada por el antirior Ejecutivo regional, los sindicatos y la patronal.

Dentro de los principales cometidos de este acuerdo el consejero de Empleo destacó la aplicación de medidas destinadas a facilitar la reinserción laboral de los colectivos con más dificultades, entre ellos los mayores de 45 años y parados de larga duración.

Recordó que su principal preocupación es garantizar el desarrollo económico de la Región como forma de seguir creando empleo.

Hernández Albarracín aseguró que las perspectivas regionales siguen siendo buenas, a pesar de las previsiones anunciadas esta misma semana por Funcas y Ceprede, que auguran a Murcia un crecimiento inferior a la media nacional. «El futuro no está escrito. Depende de la confianza y de la competitividad», respondió Hernández, que quitó importancia a las predicciones y recordó que en otras ocasiones él y el responsable de Hacienda, Andrés Carrillo, se han reunido con técnicos de los servicios de estudios y han conseguido que rectifiquen sus cálculos.

El consejero precisó que el Gobierno trabaja con «datos reales, no con estimaciones», por lo que está en mejores condiciones para hacer previsiones.

Respecto a sus nuevas competencias de Universidades, que conllevan también las de investigación, dijo que el propósito del cambio es sentar «las bases de una nueva economía», cuyo fin último es «que los trabajadores tengan empleo estable».

Juan Hernández se propone trabajar para conseguir que «la investigación esté más conectada al mundo empresarial» y a las demandas de las empresas. «Necesitamos empresas y una economía mucho más competitiva, por lo que se potenciará la reforma del sistema de innovación regional para conectar el mundo de la investigación e innovación con las empresas», señaló. Añadió que, además de mejorar el empleo y potenciar el desarrollo, hay que «sentar las bases del futuro de una nueva economía para la Región», con la aportación de las universidades y «la mejora de la formación de los recursos humanos, que deben desempeñar un papel determinante».