Miles de personas y cerca de cuatrocientos tractores se han manifestado esta mañana en Murcia en defensa de la agricultura haciéndola compatible con la recuperación del Mar Menor, la mayoría procedentes de la zona del campo de Cartagena y su comarca.
Al terminar la protesta, los organizadores han entregado un manifiesto en la Delegación del Gobierno y a la salida, después de más de una hora, han confirmado que han dado un ultimatum al Delegado: no se moverán de las calles de Murcia hasta que no haya un compromiso de que la ministra de Agricultura o un alto cargo del Ministerio visitará la laguna la próxima semana, el lunes como muy tarde.
La cabeza de la manifestación, integrada por representantes de COAG, Fecoam, Proexport, Upa, Ecologistas en Acción, ANSE, Pacto por el Mar Menor, comunidades de regantes de Cartagena y asociación de vecinos de Cartagena, entre otros, portaban una pancarta en la que se leía "Protejamos el Mar Menor. Defendamos la agricultura. Gobierno soluciones ya".
También había otras pancartas que rezaban: "Sin lluvia no hay vida, nos están matando. Si no es cierto que el gobierno derogue el decreto de la ley de aguas que lo permite", "Pedimos agua para trabajar", "Agricultura, presente y futuro ¡agua ya!" y "No entiendo de política, ¡sin agua me muero!".
Al término de la manifestación fue leído un manifiesto que exigía la urgente puesta en marcha de infraestructuras para evitar vertidos al Mar Menor como la adecuación y recuperación de las conducciones de las salmueras procedentes del rechazo de las desalobradoras para su desnitrificación en las estaciones depuradoras existentes y los denominados "filtros verdes".
El presidente del Sindicato de Regantes, Lucas Jiménez, ha dicho que la comunidad de regantes cartagenera es la más grande de España y lo que reclama es agua para regar sus cultivos y hacer compatible el medio ambiente con la agricultura.
Por su parte, el presidente de COAG, Miguel Padilla, ha advertido que el gobierno central tiene que poner en marcha las soluciones para recuperar la laguna, y calificó como "incomprensible" que haya pasado tanto tiempo y no se hayan ejecutado la mayoría de soluciones que desde 2007 reclaman.
La presidenta Federación de Asociaciones de Vecinos de Cartagena, Cristina Roca, ha recordado que tras ésta habrá otra gran manifestación el próximo 6 de mayo y ha explicado que están en la marcha "todos juntos; vecinos, ecologistas y agricultores, porque todos queremos salvar el Mar Menor y la agricultura".
El secretario de organización de UPA, Marcos Alarcón, ha afirmado que deben dejar de criminalizar la agricultura de Cartagena puesto que "no es la única responsable de la situación del Mar Menor".
"No podemos estar al albur de un gobierno en funciones o de un relevo al frente de la Región, porque el gobierno tiene que actuar y la agricultura no entiende de calendario político y la falta de agua no entiende de este tipo de cosas", agregó Alarcón.
El presidente de FECOAM, Santiago Martínez, ha dicho que los frutales empezarán a secarse sin riego y se perderían 20.000 puestos de trabajo, al tiempo que ha pedido que se arreglen lo que ha roto la CHS, en referencia al cierre hace un año de tuberías y pozos. "Nos preocupa que el ministerio no se de prisa para que ésto continúe", añadió.
El presidente de ASAJA, Alfonso Gálvez, ha exigido actuaciones inmediatas para que los agricultores puedan regar, salmueroductos que permitan un vertido legal al Mediterráneo y que el trasvase llegue a su dotación máxima, y en caso de infradotación; que se puedan extraer aguas subterráneas y desalinizar el exceso de sal del acuífero del campo de Cartagena para mantener el regadío.
El único incidente lo protagonizó un tractorista con el dirigente de COAG-Cartagena, Vicente Carrión, quién intentó impedir sin éxito que aquel retirase una muñeca hinchable de su vehículo con el cartel "Rubia dimite, los agricultores no te admiten".
La presencia de tractores y la propia marcha desde la Consejería de Agricultura a la Delegación del Gobierno ocasionó importantes problemas de tráfico hasta el mediodía.
