La Consejería de Hacienda calcula que Murcia ha cerrado 2016 con un déficit que puede rondar el 1,5%, lo que supondría más del doble del techo autorizado por el Ministerio de Hacienda para el pasado año. Esto supondría que el pasado ejercicio terminó con un desfase presupuestario de unos 230 millones de euros. En 2015 el déficit de la Administración regional alcanzó el 2,42%. Durante los últimos años se produce una diferencia de varias centésimas entre los cálculos que ofrecen la Comunidad Autónoma y el Ministerio de Hacienda debido al cómputo de los gastos ocasionados por el terremoto de Lorca y el pago de los intereses del préstamo de Corvera.
Para este año el techo autorizado a las comunidades autónomas está situado en el 0,6%, después de la revisión que fue aprobada en el Consejo de Política Fiscal y Financiera ante la presión de las autonomías gobernadas por el PSOE, que exigieron al Estado un margen mayor del previsto inicialmente, que reducía el desfase a tan solo tres décimas.
El consejero de Hacienda, Andrés Carrillo, apuntó que el dato definitivo de 2015 lo dará el Ministerio una vez que acabe de cerrar las cifras globales de la contabilidad de las autonomías.
La Autoridad Fiscal (AIReF) considera que hay cinco comunidades -Baleares, Extremadura, Cataluña, Murcia y Valencia- que no están en disposición de cumplir la disciplina exigida por lo que «requieren una senda más gradual de ajuste» para conseguir el equilibrio presupuestario, que debe alcanzarse en 2019.
Para la AIReF, «los objetivos tienen que ser exigentes pero factibles, porque el incumplimiento recurrente cuando no son factibles erosiona la credibilidad de las reglas fiscales». En este sentido, la Autoridad Fiscal insistía en que «ya ha señalado en diversas ocasiones que establecer recurrentemente objetivos que ya se percibía que no es factible cumplir afecta negativamente a la credibilidad de las reglas de disciplina fiscal».
