egún la Real Academia Española (RAE), refugiado es la persona que se ve obligada a buscar refugio fuera de su país a consecuencia de guerras, revoluciones o persecuciones políticas. El conflicto de Siria nos ha hecho darnos de bruces con la realidad con cientos de miles de personas huyendo de sus lugares de origen con niños en brazos intentando no morir en el mismo lugar en el que nacieron. Ante tal avalancha, las fronteras se cerraron de un día para otro y la mayoría de los afectados se hacinan hoy en día en campos de refugiados en Grecia a la espera de que algún país intente cumplir con las cuotas de acogida a las que se comprometió ante la Unión Europea y deje de mirar para otro lado.
En estos dos últimos años y hasta el pasado 14 de febrero han llegado al municipio de Murcia 180 personas refugiadas por diversos motivos, entre las que se encuentran 12 reasentados sirios. Desde Cruz Roja Murcia (una de las ONG que colabora con la Concejalía de Derechos Sociales), el responsable del Programa de Protección Internacional y Asilo, Juan Antonio Balsalobre, apunta a la necesidad de diferenciar entre 'reubicado' (persona que estando en Grecia ha sido enviado a otro país de la UE) y 'reasentado' (aquellos que vienen de los campos de refugiados).
La concejala de Derechos Sociales, Conchita Ruiz, hace balance del año y medio que lleva funcionando la Oficina del Refugiado en Murcia. «Llegó un momento en el que nos vimos desbordados por la cantidad de personas que se ofrecían para ayudar, ya fuera con donaciones de ropa, libros o incluso para dar clases de idiomas. Fue una ola de solidaridad que había que gestionar de alguna forma en coordinación con las organizaciones no gubernamentales que trabajan precisamente con las personas refugiadas», recuerda. De ahí que se pusiera en marcha este órgano que nació en septiembre de 2015 atendida por cinco trabajadores sociales de la sección de Prevención e Inserción Social especializados en el trabajo con extranjeros, en la gestión de recursos para la integración social y en el trabajo con asociaciones. Desde la Oficina del Refugiado de Murcia se han organizado diversos eventos, en colaboración con la Plataforma, como la campaña de recogida de alimentos y productos sanitarios realizada por la asociación de estudiantes sirios de la Universidad de Murcia con destino a los campos de refugiados.
Andrés Duarte, jefe de servicio de la Concejalía, explica que mantienen una estrecha colaboración con las organizaciones acogedoras ACCEM, Cruz Roja, la Fundación Cepaim y Murcia Acoge, tanto para la atención de las necesidades básicas de los refugiados en el municipio de Murcia como en la coordinación de las necesidades de las propias entidades.
Cuando llega una persona refugiada a Murcia tiene que seguir un proceso que las propias ONG han diseñado con servicios sociales. Juan Antonio Balsalobre de Cruz Roja Murcia detalla que este itinerario tiene una duración de entre 18 y 24 meses. En la primera fase se realiza básicamente la acogida y se intentan cubrir las necesidades básicas de la persona. En una segunda se trabaja en la integración, para lo cual se desarrollan todas las tareas burocráticas para obtener los expedientes administrativos, jurídicos, darle apoyo psicológico y aprender el idioma, además de trabajar en la integración para el empleo y cambiar su vivienda a otra independiente que mantienen con ayudas del Ministerio. Y la tercera y última fase sería la de la autonomía, en la que el refugiado busca una casa propia que mantiene con sus propios recursos y apoyándose sólo de forma puntual en un seguimiento.
La importancia del idioma
Balsalobre subraya que el idioma resulta fundamental porque facilita mucho la integración, de ahí que se haga hincapié en los cursos y en actividades de convivencia. «Puedes estudiar un idioma, pero si no lo pones en práctica y lo utilizas no te sirve de nada», afirma el responsable del Programa de Protección Internacional y Asilo de Cruz Roja Murcia, quien recuerda que «la Plataforma ayuda mucho en este sentido organizando actividades de ocio e incluso en la Universidad de Murcia (UMU) han puesto en marcha un Plan Refugio facilitando el acceso a estudios a estas personas y el uso de las instalaciones deportivas».
El programa de Cruz Roja Murcia lleva funcionando un año, ya que antes se limitaban a facilitar información y ahora trabajan de forma activa con aquellas personas que llegan a la Región. «Estamos afrontando un reto muy importante, pero hay que pensar que es una experiencia muy positiva el poder trabajar con ellos y lograr su integración», afirma. Entre los motivos que llevaron a los refugiados que han llegado a Murcia a salir de sus países destacan las persecuciones ideológicas, religiosas, conflictos armados o persecución por identidad sexual, entre otros.
La concejala de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Murcia explica que existe una clara diferencia entre el inmigrante y el refugiado, ya que éste en cuanto obtiene el reconocimiento de su condición pasa a tener la misma consideración que la población autóctona, por lo que tiene las mismas posibilidades, derechos y deberes para el acceso a los recursos que el resto de los ciudadanos. Conchita Ruiz considera que este movimiento de ciudadanos también ha tenido efecto sobre las propias administraciones públicas, y en concreto, sobre las administraciones locales, que han pasado de ser un espacio casi inexistente a reivindicarse como un elemento necesario en el proceso de acogida e integración de los refugiados que están llegando.
