Los jóvenes murcianos que no estudian ni trabajan se resisten a dejar de ser ´ninis´. Su desinterés por aprender un oficio o simplemente estudiar idiomas o Informática ha obligado a la Federación de Empresarios del Metal (FREMM) a aplazar 15 de los 25 cursos que debía empezar a impartir el 1 de febrero dentro de los programas de Garantía Juvenil organizados por el Servicio de Empleo y Formación (SEF). La patronal del Metal hace un llamamiento a los padres de los 25.000 ninis que hay en la Región para que los animen a apuntarse en los cursos y no dejen pasar la oportunidad de conseguir una titulación profesional que les ayudará a encontrar trabajo. La FREMM, que dispone de un centro de formación con 16.000 metros cuadrados de talleres y aulas, tiene asignados 42 cursos, que peligran si no encuentra candidatos interesados.

El presidente de la patronal del Metal, Juan Antonio Muñoz, que ayer mantuvo un encuentro con los medios de comunicación acompañado por el secretario general de la FREMM, Andrés Sánchez, el director de Formación, Ramón Muñoz, y la directora del departamento económico, María José Aragón, aseguró que todas las organizaciones que participan en la programación del SEF están teniendo los mismos problemas para reclutar a estos jóvenes que han colgado los libros y no muestran interés por formarse para conseguir un trabajo.

Las dificultades para encontrar alumnos han llevado al director del SEF, Alejandro Zamora, «a plantearse sortear una tableta o un viaje» para atraer a los jóvenes e intentar que ocupen las aulas, según contaba Juan Antonio Muñoz.

Por su parte, el director de Formación de la FREMM explicó que el SEF está utilizando todos los recursos posibles que ofrecen las redes sociales y la aplicación desarrollada por este organismo, denominada ´SEF Móvil´, pero después de enviar 6.000 mensajes para dar a conocer el programa de formación y los plazos de inscripción, solo ha conseguido la respuesta de cuatro de los destinatarios.

Más suerte tuvo la convocatoria de un acto informativo en el salón de actos de la FREMM al que acudieron 35 de los 400 invitados, «la mayor parte de ellos acompañados por sus madres», según precisó Juan Antonio Muñoz.

La FREMM tiene previsto impartir 42 cursos este año. En enero abrió el plazo de inscripción para 25, pero al llegar el 1 de febrero solo ha conseguido alumnos suficientes para poner en marcha 10.

De momento, ha tenido que aplazar 15 de los 25 que debían haberse iniciado el día 1 de este mes. El secretario del Metal recordó que estos programas están financiados con las ayudas europeas al Plan de Garantía Juvenil y deben materializarse antes del verano, dado que en caso contrario se perderían. A su juicio, «los padres no conocen realmente las posibilidades que les ofrecen las 6.000 plazas que ofrece el SEF para que los menores de 30 años puedan aprender un oficio y conseguir una certificación profesional que les ayudará en el futuro a conseguir un trabajo». Añadió que muchos de los alumnos encuentran empleo en las empresas en las que hacen prácticas.

Andrés Sánchez hizo un llamamiento a los padres para que no dejen pasar la oportunidad de inscribir a sus hijos en unos cursos que les permitirán conseguir una acreditación profesional o una titulación oficial en idiomas. Según sus cálculos, la mitad de los alumnos que pasan por los talleres de la FREMM encuentra un empleo al acabar el curso, aunque la capacidad de inserción laboral llega al 90% en el caso de los soldadores, que es la profesión más demandada en este momento. Añadió que los alumnos que viven a más de diez kilómetros de distancia incluso podrán cobrar los gastos de desplazamiento para cubrir el transporte público o el kilometraje.