La Policía ha encontrado dos escopetas de aire comprimido, un fusil de asalto de Airsoft y dos katanas en la casa de la yihadista murciana detenida hoy en Alicante.

Durante 8 horas y media se ha prolongado el minucioso registro ordenado por un juez de la Audiencia Nacional en la casa situada en una segunda altura del número 3 de la calle Pintor Antonio Amorós, tras el cual la detenida ha salido completamente tapada con túnicas de color granate y acompañada de varias agentes. Fuentes de la investigación han informado a Efe de que se han hallado media docena de teléfonos móviles y dispositivos electrónicos, entre ellos una tableta, cuyos contenidos han sido copiados para su posterior análisis.

En el registro no se han encontrado armas blancas ni publicidad en soporte papel del Estado Islámico, aunque sí diversa documentación que acredita varios viajes a Siria y la intención de realizar un nuevo traslado en un futuro próximo, entre otro material.

Numerosos curiosos del barrio Juan XXIII han aguardado a la salida de la mujer entre un fuerte dispositivo policial. Al ver las cajas con las armas que salían en manos de los agentes, varios vecinos han increpado a la detenida, que ha sido introducida en un coche policial para su traslado a la Dirección General de Información del Cuerpo Nacional de la Policía, en Madrid, desde donde será puesta a disposición del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco.

Por su parte, los hijos han quedado bajo la atención de los servicios sociales, y son una niña de 6 años y varones de 5, 7 y 15.

Hablan los vecinos

Los vecinos de la mujer de 36 años detenida en Alicante por su presunta vinculación al Daesh han explicado que se radicalizó hace unos años y que, en ese momento, pasó a cubrirse la cabeza y el resto del cuerpo.

Varios curiosos se acercaron a los alrededores del domicilio de la arrestada, en el número 3 de la calle Pintor Antonio Amorós, en el alicantino barrio de Juan XXIII, donde hubo un llamativo despliegue policial mientras seguía el registro de la vivienda en presencia de la detenida. La inspección se prolongó durante 9 horas desde que comenzase a las cinco y media de la madrugada.

Una vecina ha relatado a Efe que sus hijas iban a la misma clase del hijo mayor de la detenida (hace entre 8 y 9 años) y que, por aquel entonces, la mujer, llevaba una vida "normal" y que era "simpática" e "iba vestida como las demás".

"Algunos días, al salir del colegio, nos juntábamos varias mamás mientras jugaban los niños, entre ellas ella, y hablábamos de las cosas habituales en esas situaciones", ha señalado sobre la arrestada, que entonces vivía en otro domicilio del mismo barrio de Juan XXIII, en la zona de Miradores.

Agentes de la Policía registran esta mañana la vivienda de la mujer detenida en Alicante por su vinculación con el Dáesh, una española viuda de un combatiente yihadista que intentó viajar a la zona de conflicto sirio-iraquí con sus cuatro hijos menores.

Esta mujer ha indicado que al poco tiempo le perdió la pista y que, posteriormente, ha regresado a vivir a la misma zona, hace unos 5 años, momento en el que "ya estaba radicalizada" porque se relacionaba poco y vestía completamente tapada a excepción de los ojos.

"A mí me saludaba porque me conoce, pero sin más: Ya no era ella", ha opinado esta vecina.

Otro habitante de los alrededores ha comentado a Efe que la detenida iba siempre tapada con túnicas de color negro o granate, con gafas de sol y que siempre llevaba puestos guantes, "incluso en pleno agosto".

"No se relacionaba con nadie. Se la veía ir o venir de comprar en el supermercado pero no hablaba con los vecinos", ha manifestado. Otra vecina ha destacado que cuando subía en el autobús no hablaba con nadie ni se sentaba con hombres.

Los vecinos han coincidido en su sorpresa y "perturbación" al enterarse de la intención de la mujer de trasladarse a Siria con sus hijos.

Los servicios sociales de la Generalitat se han hecho cargo de los cuatro hijos de la detenida, tres niños y una niña de cuatro, seis, siete y 15 años. El mayor de ellos, según la vecina, en alguna ocasión había dicho que a su padre lo habían matado de un tiro.

El delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, ha confirmado que esta mujer realizaba labores de propaganda de la actividad yihadista a través de las redes sociales, en las que "lanzaba consignas muy radicales, muy agresivas", siempre con un discurso "muy violento".

Moragues ha destacado la "eficacia policial" y la coordinación de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado con los servicios de inteligencia de Marruecos, al tiempo que ha recordado que desde que se elevó la alerta por terrorismo a nivel 4, en junio de 2015, se ha detenido en España a 190 yihadistas. Esta es la primera detención en la Comunitat Valenciana en la que va de año.