Hay muchas preguntas, todas realmente, que contestar sobre una posible fuente de vertidos al Mar Menor: La procedente del acuífero superior del Campo de Cartagena. El hecho de que no haya ningún estudio fiable que pueda responder a estas incógnitas, ha llevado a los hidrogeólogos que forman parte del Comité de expertos sobre el Mar Menor de la consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, a diseñar un proyecto de investigación.

«Hasta ahora no se había hecho ningún estudio tan ambicioso y completo», explica el portavoz del Comité y catedrático de Ecología, Ángel Pérez Ruzafa, quien añade que sí hay datos aislados de sondeos, aunque con resultados muy dispares. Unos cifran en 5 hm3 las aportaciones del acuífero a la laguna y otros los elevan a 60 hm3.

Entre las incógnitas que van a intentar despejar los científicos con este estudio figuran cuántos excedentes tiene el acuífero; cuánto agua entra realmente al Mar Menor procedente de esta fuente; y por dónde entran, si superficialmente, o por filtraciones difusas o subterráneas.

«Se trabajará para dar respuesta a esta falta de información y para diseñar un modelo de validación» de los datos, apunta el catedrático. Está previsto que este grupo de trabajo mantenga la próxima semana una reunión para definir el proyecto investigación definitivo, y aunque no se han previsto plazos concretos para acabarlo, «se pretende hacer lo antes posible», añade el portavoz del Comité de expertos.

En el estudio participarán los expertos en hidrología Rosa Gómez Cerezo, Julia Martínez Fernández y Francisco Robledano Aymerich, todos de la UMU; y el hidrogeólogo José Luis García Aróstegui, del Instituto Geológico y Minero. A ellos se han unido expertos en estas materias del Instituto Español de Oceanografía (IEO) y de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT).

De los resultados de este estudio puede derivar el uso que se le dé al acuífero, de donde muchos agricultores del Campo de Cartagena extraen agua, que luego tratan, desalinizándola, para utilizarla para regar sus cultivos.

Además, este análisis puede ser un paso adelante hacia la gestión integrada de todos los recursos hídricos que afectan al Mar Menor, y en la cual deben incluirse los acuíferos. Esta es una de las demandas recientes de una parte de la comunidad científica, nacional e internacional, que ha estudiado la problemática de la laguna. Y cuyas conclusiones han publicado en la revista especializada en Medio Ambiente Environmental Reviews.

En opinión de estos investigadores, esto reduciría los impactos contaminantes sobre la laguna en época de sequía.

Otros interrogantes

Pero lo que está claro es que quedan otras preguntas por responder en referencia a la laguna salada y a su comportamiento. Por ejemplo, ¿cuánto tiempo puede tardar en regenerarse?¿Un año, diez, treinta? ¿Cuál es la aportación de agua que recibe al año del mar Mediterráneo desde la gola de Marchamalo o el canal del Estacio, dos de las principales vías de conexión entre ambos mares?

¿Qué grado de colmatación ha sufrido la laguna salada, que provoca la reducción de su superficie marítima?

¿Y cuánto ha perdido en profundidad? Ya en unas jornadas sobre 'Alternativas para el Mar Menor', celebradas en 1980 en San Pedro del Pinatar, los expertos dejaron claro que la laguna había perdido 50 centímetros de profundidad máxima, «en un periodo de tiempo muy corto», y que «era casi imposible localizar profundidades de 7 metros, lo que es bastante alarmante». ¿Y ahora?

Los Nietos, una imagen no tan bucólica

Esta foto de la playa de Los Alemanes del Mar Menor, en Los Nietos, fue tomada el jueves a la caída de la tarde. Esta zona suele presentar esta nada agradable imagen a menudo, por culpa de la forma en la que se construyó el puerto, según denuncian los vecinos, ya que no corre bien el agua. Ésta suele estancarse y la espuma se forma cuando sopla el viento de Levante, lo que es bastante habitual en la zona