¿Qué objetivos tiene en esta nueva etapa al frente de la Asociación Murciana de Mediadores?

La asociación llevaba un tiempo planteando la necesidad de cambiar la ejecutiva, pues se necesitaba dar un giro, un cambio. Junto con otros compañeros, planteamos un proyecto con el objetivo de dar a conocer a la sociedad murciana lo que es la mediación integral, en todos los sentidos. Hemos hecho la nueva ejecutiva coordinada por mi persona y formada por otras ocho personas. No somos tantos mediadores en la Región. Aproximadamente 60 en nuestra asociación.

¿Qué es la mediación integral?

La mediación integral es un viejo modelo de resolución de conflictos a través la voluntad de las personas que son parte del mismo. Yo pongo el ejemplo de cuando dos personas van a una ciudad que desconocen y al final tienen que recurrir a un taxi para que los conduzca al lugar donde quieren ir. La mediación es un vehículo que te lleva por caminos distintos por los que ibas para llegar a acuerdos entre personas que tienen un grave conflicto.

¿Recurren mucho los ciudadanos de la Región a esta forma de resolución de conflictos?

La mediación sigue siendo la gran desconocida, pero se están dando pasos importantes. No obstante, la Región es una de las comunidades autónomas con menos mediadores por habitantes. Y es que mientras que Andalucía, Cataluña o País Vasco cuentan con una Ley de Mediación Integral, aquí solo se plantea una Ley de Mediación Familiar, lo que nos parece un error. Por eso vamos a reunirnos con todos los grupos políticos, para darle una vuelta a la ley que pretende aprobar el PP, proponiendo una ley integral que nos sitúe en el mismo vagón que el resto de comunidades autónomas. También queremos hablar con los alcaldes, para concienciarles de que deben expandir la mediación. Proponemos la necesidad de la mediación integral, pues la medicación sirve para la resolución de todos los asuntos, siempre que se dé una circunstancia importante: voluntad de las personas para llegar a un acuerdo.

¿Qué garantía de éxito tiene la mediación en la resolución de conflictos?

Muy alta. La garantía de éxito de la mediación supera el 80%. Pero se llevan muy pocas porque, como le he comentado anteriormente, la mediación es la gran desconocida. Además, con la mediación se consigue un mejor acuerdo, porque son las partes las que deciden el consenso y, por tanto, es más fácil llevarlo a cabo.

Algún caso de éxito en el que usted haya participado...

He participado en muchos asuntos, pero corresponden al ámbito privado. He estado en algunos casos de divorcios de una pareja con hijos siempre hemos llegado a entendimientos. Le puedo decir que he sido funcionario prisiones durante 40 años y conozco muy bien las cárceles. Hay un libro titulado Con los ojos del otro, que narra el trabajo que han hecho mediadores de País Vasco y Navarra entre presos de ETA y víctimas. Habla de 13 casos concretos en los que no había negociación ni se buscaban acuerdos, pero que sirvieron las víctimas empezasen a saber las causas que habían llevado a los asesinos a cometer sus fechorías, mientras que los propios etarras hicieron reconocimiento del daño causado y la innecesidad de haberlo realizado. Si se han dado pasos en la paz en Euskadi, ha tenido mucho que ver esta parte de mediación, porque es lo que ha dividido a los presos en las cárceles. Gracias a la introducción de las mesas de mediación, se consiguió que muchos presos terroristas empezaran a reflexionar y la unión de los mismos se desquebrajó.

¿Necesitaría el PSOE un mediador para resolver su crisis interna?

El PSOE, y la política en general, necesita mediadores. Entre PP y PSOE, entre socialistas y Podemos... Pero un mediador debe ser imparcial y neutral. La mediación no solo sirve para resolver conflictos, sino que es un modelo de convivencia.