¿Qué habría que hacer para resolver los desajustes que soporta la economía regional? Es, quizás, la pregunta del millón y cada uno tendrá su particular receta, pero algunas consideraciones realiza el estudio de BBVA Research que han presentado en LA OPINIÓN y que suponen los retos de futuro.

Hay que tener en cuenta, como apunta el economista de la entidad Juan Ruiz, que, pese al crecimiento económico que se está produciendo, la Región no va a recuperar el nivel de renta percápita de 2008 ni siquiera a finales de 2017, cuando se cumplan prácticamente diez años desde que se desatara la profunda depresión.

El primer gran capítulo que se destaca en el informe se refiere al mercado laboral. Dos cifras son suficientemente representativas para saber que, pese a la recuperación económica y la creación de empleo, un 40% de los desempleados murcianos lleva más de dos años en paro, lo que genera desesperanza y, en muchos casos, abandono de la búsqueda de empleo, con el consiguiente empobrecimiento de las familias que deben mantener.

El otro dato es igual o más negativo que el anterior. El porcentaje de jóvenes que ni estudian ni trabajan (los conocidos como ´ninis´) se mantiene en el entorno del 20%; es decir, que uno de cada cinco jóvenes murcianos no busca empleo ni se está formando para el mercado laboral, que amenaza con convertirse en una generación perdida que no se puede permitir una sociedad.

El segundo capítulo también se refiere al capital humano, porque el promedio de años de escolarización es un 6% inferior en Murcia que en España. «La mejora del nivel educativo favorece la empleabilidad de la población, aumenta la productividad y disminuye la tasa de desempleo», señala el informe. Precisamente la reducción del paro debería colocarse en el centro de las políticas de empleo, sobre todo teniendo en cuenta los altos índices que soporta la Región.

Los analistas de la entidad financiera ponen como tercer capítulo a considerar el de la regulación que deben emprender las administraciones públicas. Dos son las consideraciones que hacen en este apartado. La primera, que abrir un negocio en España es un 60% más costoso que en la media de los países que forman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). La necesidad de la creación de más empresas para la generación de riqueza y de empleo impone reducir los costes que conlleva, porque realizar los trámites para su constitución cuesta el doble de días que en los países desarrollados.

La otra pata de la regulación debería ser, para la entidad financiera, «políticas encaminadas a aumentar el tamaño de las empresas, que favorecerán el potencial de crecimiento en la Región». Así se expuso, además, durante el debate celebrado en LA OPINIÓN. Consideran los expertos de BBVA Research que el aumento del tamaño permitiría un crecimiento de las exportaciones y una estabilidad empresarial, sobre todo si se considera que la inmensa mayoría de las empresas murcianas no tienen más de quince trabajadores.

El último reto al que se enfrentaría la Región sería la digitalización. La transformación digital de la industria y los servicios, entre otros, mejoraría la competitividad empresarial, destaca el estudio, y agrega que la competitividad debe venir de todos los frentes para alcanzar una buena posición en los mercados.

En este aspecto, indica, además, que la Región de Murcia se mantiene por debajo de la media española en cuanto a los avances en transformación digital.