Cinco agentes de policía han resultado heridos en el motín que han realizado más de medio centenar de inmigrantes en la noche del miércoles en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), ubicado en la pedanía murciana de Sangonera la Verde.

Según pudo saber esta redacción de fuentes cercanas a la investigación del suceso, un total de 77 inmigrantes de distintas nacionalidades consiguieron escapar de las instalaciones. Varias patrullas del cuerpo Nacional de Policía se han desplazado hasta el lugar para dar captura a los escapados.

Uno de los internos simuló encontrarse muy enfermo, por lo que se pidió la presencia de una ambulancia en el CIE. Cuando el vehículo accedía a las instalaciones, los inmigrantes se amotinaron y atacaron a los agentes, resultando heridos cinco de ellos, según pudo saber este periódico por las mismas fuentes. Uno de los cinco agentes heridos presentaba policontusiones y, otro de ellos, un brazo roto. La huida se ha producido en torno a las diez de la noche de este miércoles.

El Sindicato Unificado de Policía, a través de su cuenta de la portavocía en Twitter, destacaba ya por la noche la falta de medios con la que tienen que trabajar los agentes:

Horas después del motín, el delegado del Gobierno en la Región de Murcia, Antonio Sánchez-Solís, aseguraba que a media mañana del jueves ya se había detenido a 44 de los 77 inmigrantes y que cuatro de los cinco policías heridos habían recibido el alta médica.

Sánchez-Solís destacaba que los inmigrantes actuaron con "extrema violencia" en su fuga. Se ha establecido una orden de búsqueda nacional para encontrar a los fugados.

El Sindicato Unificado de Policía ha exigido el cierre del CIE porque, asegura, no está en condiciones para garantizar la seguridad ni de agentes ni de internos.

Nueva fuga en el CIE

Esta no es la primera vez que ocurre algo similar en el Centro de Internamiento de Extranjeros de Murcia. El verano de 2015, ocho argelinos hicieron un agujero en la valla metálica y consiguieron huir del lugar, aunque posteriormente fueron localizados por la Policía. El 23 de junio de 2012 se escaparon otros 25 inmigrantes llegados en patera a la costa de Almería y pendientes de expulsión tras golpear a los agentes que los custodiaban. Asimismo, también consta que el 18 de agosto de 2013 otra decena de internos huyeron tras saltar la valla del centro. Por último, en el año 2000 fueron 11 los inmigrantes que se fugaron, esta vez forzando las rejas.