Un nuevo frente se le abre, ahora en el Parlamento Europeo, aunque encontrando un gran campo abonado en la vecina Castilla-La Mancha, a los regantes del Trasvase Tajo-Segura.

La Comisión de Peticiones de la Eurocámara pedirá un cambio íntegro del modelo de gestión de los recursos hídricos en España y que se de prioridad «a los requisitos medioambientales frente a los socioeconómicos», según el proyecto de informe presentado, y al cual se pueden presentar alegaciones antes del 13 de julio, fecha en que se votará.

Redactado por los eurodiputados que visitaron en febrero la cuenca del Tajo y la desembocadura del Ebro, invitado por colectivos antitrasvases, y con el eslovaco del Partido Popular Europeo Pál Csáky, recomendará solicitar a la Comisión Europea que «supervise de cerca» la forma en que se aplica la legislación europea, especialmente en los planes hidrológicos del Ebro y el Tajo.

Desglosado en once puntos, el informe insta a las autoridades españolas a integrar el agua de las desalinizadoras para mejorar la seguridad del suministro y que el agua se destine a las cuencas orientales como el Segura y no se vincule de forma alguna al Tajo.

Reacciones

El presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), José Manuel Claver, hizo un llamamiento urgente a todos los eurodiputados españoles para que presenten enmiendas que impidan que el texto de la Comisión de Peticiones de la Eurocámara se apruebe como está. «Es un texto plagado de falsedades y que cumple con los intereses de los antitrasvasistas del Tajo».

Muy enfadado, y lamentando que «ahora se nos abra también este frente», Claver explicó que la propuesta no es definitiva y su votación no será hasta el día 13 de julio. «Los europarlamentarios que vinieron a visitar el Tajo no tienen ni idea de la idiosincrasia de una cuenca mediterránea y los problemas de falta de agua que sufre; ellos son del norte de Europa», apuntó.

Por eso, apuntó que, «sin olvidarnos de los aspectos medioambientales, no podemos dejar de lado, como pretenden, las necesidades de los ciudadanos; si se quiere, se puede hallar una solución que armonice ambas».

Por último, Claver apeló a los eurodiputados españoles: «A ver si espabilan, porque si no tendremos que llamarles 'traidores' a España, como en su día denominó Indalecio Prieto a quienes se opusieron al Trasvase Tajo-Segura».

La consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez Cachá, subrayó que el informe «no es objetivo ni mucho menos completo», al recoger una visión parcial y limitada de los efectos del Trasvase Tajo-Segura en la sociedad española en general y en el sureste peninsular en particular. Estos, dijo, «no pueden ser obviados al evaluar las herramientas de planificación hidrológica».

Cachá puntualizó que los planes hidrológicos se han basado en la directiva marco del Agua y que «uno de los esfuerzos más destacados ha sido la caracterización de los caudales ecológicos cuya finalidad es el mantenimiento y protección de los hábitats y especies protegidas» en cada uno.

Tras calificar de «tendencioso» el uso que Castilla-La Mancha está haciendo del informe, la consejera subrayó el énfasis que el documento realiza sobre la necesidad de incrementar el caudal ecológico del Tajo para diluir las aguas residuales de Madrid.

«Este principio rompe todos los criterios medioambientales que se ha dado a sí misma la UE, siendo lo razonable exigir una mejor depuración de las aguas residuales de dicha comunidad», declaró.

Ecologistas y manchegos

Las organizaciones ambientales, como Ecologistas en Acción, Amigos de la Tierra o Greenpeace, celebraron el «varapalo» del Comité de Peticiones de la Eurocámara. Recordando que las ONG votaron en contra de los planes hidrológicos por los mismos motivos que esgrime ahora el Comité, defendieron que deben establecerse caudales ecológicos «en condiciones» para todas las cuencas hidrológicas, porque los actuales priman dar una oferta ilimitada de un recurso limitado.

«Trasvases, tuberías, todo es muy insostenible y lo único que hace es agravar el problema, como por ejemplo el trasvase Tajo-Segura», subrayó el portavoz de la campaña de Energía de Greenpeace, Julio Barea.

Desde Castilla-La Mancha, la consejera de Fomento, Elena de la Cruz, calificó el informe como «técnico y equilibrado» y pidió que se respete el texto íntegro y su espíritu y no se incorporen enmiendas.

De la Cruz destacó que, durante su intervención en la Eurocámara, una europarlamentaria que visitó el Tajo habló de «presiones intolerables» por parte de los regantes al Parlamento Europeo para la modificación del informe, y dijo asimismo que le había impactado la visión del Tajo a su paso por Talavera, con «esas islas de tierra y las canoas encalladas».

En referencia al Trasvase Tajo-Segura, De la Cruz apuntó que el precio del agua enviada -unos 0,12 céntimos por metro cúbico- significa que se da casi regalada y apostó porque la tarifa en la que se repercutan «de manera efectiva» los costes, para que así se valoren otras opciones como las desaladoras -cuyo precio supera los 0,50 céntimos/metro cúbico-.

Por último, la consejera consideró que el informe de los europarlamentarios da la razón al Ejecutivo castellano-manchego en «la lucha por la justicia» que han emprendido.

Aprovechando este informe, el Ejecutivo manchego pedirá al nuevo Gobierno que revise, e incluso retire, los planes hidrológicos recientemente aprobados porque se han hecho al margen de la Directiva marco del Agua europea, defendió.